Yakarta: son ilegales las pretensiones de Beijing sobre el Mar Chino meridional

Los chinos pretenden explotar las aguas abundantes en pesca  de algunas islas indonesias. Después de Filipinas, el gobierno indonesio es el primero en reconocer la sentencia internacional que en 2016 rechazó las reivindicaciones chinas. Para los indonesios: la “Nine-Dash line” de China está contra la Convención ONU sobre el derecho del mar. Las tratativas por un código de conducta para la navegación en la región se llevan adelante ya desde 2016.

 


Yakarta (AsiaNews)- Indonesia rechaza las pretensiones territoriales de China sobre el Mar Chino meridional. En una nota oficial enviada a las Naciones Unidas en los días pasados, l gobierno indonesio reconoce la validez de la sentencia de la Corte internacional de arbitraje de La Haya, que en 2016 definió “sin bases” las reivindicaciones chinas sobre casi el 90% de este vasto espejo de agua.

Hasta ahora los líderes indonesios habían mantenido un perfil bajo sobre las disputas internacionales territoriales en la región. Solo el margen septentrional del país es lamido por el Mar Chino meridional, en correspondencia de las islas Natuna. Los chinos no hacen reclamos territoriales sobre este archipiélago de 272, pero reivindican el derecho de explotar sus sus aguas abundantes de pesca, hecho que encuentra la firme oposición de Yakarta.

En diversas ocasiones , la Marina militar indonesia intervino para alejar a los barcos pesqueros chinos escoltados por la Guardia costera y de la milicias marítimas de Beijing. El último incidente de este tipo sucedió a inicios de enero. 

Es la primera vez que un país del sudeste asiático apoya en modo explícito la decisión de la corte arbitral, investida del caso de Filipinas. Junto a Vietnam, Malasia, Taiwán y Brunei, y con el activo apoyo de los EEUU, Manila es uno de los países que rechaza el expansionismo de Beijing en el Mar Chino meridional. Ésto no impidió a China ocupar y militarizar algunas islas y bancos de coral de la zona. 

Yakarta sostiene que la “Nine-Dash line”, la demarcación territorial reivindicada por Beijing según motivaciones históricas, no tienen ningún fundamento legal y viola la Convención ONU sobre el derecho del mar. En una misiva enviada a las Naciones Unidas el pasado diciembre, Malasia se expresó en los mismos términos. Kuala Lumpur pide a la ONU trazar los límites de la plataforma continental que desde su costa septentrional se extiende en el Mar Chino meridional. Pero, las reivindicaciones malayas contrastan con aquellas de Beijing.

La Asociación de los países del sudeste asiático está comprometido en negociar con China un “código de conducta” para la navegación en el Mar Chino meridional, que debería ayudar a reducir las tensiones. Las tratativas se arrastran desde 2016 con escasos resultados, sobre todo porque Beijing se niega atribuir al documento un valor legal vinculante.