Es el país más a riesgo, pero oficialmente se niega que haya casos positivos o muertos. No se aplica ninguna medida sanitaria. Testimonios, a menudo anónimos, hablan de hospitales llenos de personas con problemas respiratorios, cementerios llenos de sarcófagos, enfermeros que mueren.
Ashgabat (AsiaNews) - De toda Asia Central es el país más en riesgo de Covid-19. Lo dice la agencia rusa Rosbalt. Sin embargo hasta hoy en el país se niega que haya casos positivos, no existen medidas de protección, nada de mascarillas o distanciamientos, ni siquiera respiradores de emergencia en los hospitales.
Mientras tanto, los EEUU destinaron 1,5 millones de dólares para sostener la lucha al Covid-19 en Turkmenistán. Como garantía de la financiación americana, a fines de abril fue programada una visita de expertos internacionales para controlar la situación, pero hasta ahora no fue posible efectuarla.
Mientras tanto, en el país se registra un pico extraordinario de “neumonía” entre la población. Como han publicado el 10 de junio los corresponsales de Radio Azatlik en la capital Askhabad, los hospitales de la ciudad están repletos de pacientes con dificultades respiratorias, pero las autoridades continúan negando que se trate de coronavirus. Los operadores del Centro para la profilaxis y la atención de las infecciones, bajo anonimato, se declaran muy preocupados por las condiciones de los pacientes, entre los cuales ya se cuentan muchos decesos.
Entre los médicos no hay dudas que se trate de una infección de coronavirus. Según los testigos recogidos, los pacientes mueren directamente durante las visitas preliminares, y se anotan los nombres de las personas que estuvieron en contacto con ellas. La indicación de los médicos, transmitida directamente a pacientes y visitadores, es de tener en casa a todos los ancianos.
Algunos casos fueron dado a conocer: una enfermera de Lebapa, que trabaja en el reparto de anestesiología, está enferma seguramente de coronavirus, según la dirección del reparto. Así también otras enfermeras del mismo hospital que no quisieron hacer públicas sus condiciones. En el reparto de Lebapa se dice que han recibido a una paciente infectada proveniente de China, muerta después de una operación a los pulmones. Otros decesos se habrían verificado en Dashoguse, siempre en el silencio de las fuentes de información y los cementerios del país estarían cerca del colapso, en la imposibilidad de garantizar los servicios fúnebres.
James Gilmore, embajador de los EEUU en la Ocse, la Organización para la seguridad y la cooperación en Europa, envió vía Twitter a los gobernantes de Turkmenistán que trabajen con transparencia y que difundan los datos reales sobre la pandemia en el país. La Organización mundial de la salud renovó el pedido de poder enviar una comisión de expertos para evaluar la situación.