Expertos de la ONU, contra el plan de anexión de Israel: ‘Apartheid del Siglo 21’

Un panel de 47 miembros critica el proyecto del gobierno israelí, que cuenta con el respaldo de su aliado, los EEUU. Conduce a la creación de un  “Bantustán palestino”. Y es contrario a la carta de la ONU, a las convenciones de Ginebra y a las resoluciones del Consejo de Seguridad. Satisfacción entre los palestinos; fuente israelí ataca: “No hace nada para hallar una solución”.


Jerusalén (AsiaNews/Agencias) - Decenas de expertos de derechos humanos de las Naciones Unidas condenaron de forma rotunda y unánime el plan israelí de anexión de parte de los territorios ocupados en Cisjordania, definiendo el proyecto como “el apartheid del siglo 21”. Según los miembros del grupo, alrededor de cincuenta en total, el proyecto que sostiene el Primer Ministro Benjamín Netanyahu viola el derecho internacional y conduce a la creación de un “Bantustán palestino”.

Al día de hoy, más de 600.000 colonos judíos viven en los 140 asentamientos esparcidos por Cisjordania y Jerusalén Oriental. Gran parte de la comunidad internacional considera que la situación de estas personas es ilegal, de acuerdo a lo que marca el derecho internacional; muy diferente es la visión del gobierno israelí y de su aliado estadounidense.

El nuevo Ejecutivo, fruto del acuerdo entre el primer ministro Benjamín Netanyahu y el líder de la oposición Benny Gantz, tiene entre sus objetivos la anexión de los territorios y la regularización de las colonias. Un proyecto que preocupa a los líderes cristianos de Tierra Santa, que consideran que esta política es “grave y catastrófica”, y que además goza del apoyo de los Estados Unidos en el contexto del controvertido “Acuerdo del Siglo”, el plan de paz elaborado por la administración Trump. 

Para los 47 expertos, nombrados por el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, “la anexión de los territorios ocupados es una grave violación de la Carta de la ONU y de las convenciones de Ginebra”. Además, el proyecto contrasta con las decisiones tomadas en los últimos años por el Consejo de Seguridad y por la Asamblea General de la ONU”, que sostienen que “la adquisición de territorios mediante la fuerza o la guerra es inadmisible”. 

Por otro lado, agregan, la ocupación israelí ya de por sí es “fuente de profundas violaciones a los derechos humanos, cometidas contra la población palestina” y “están condenadas a aumentar luego de la anexión”. “Dos pueblos  - concluye el comunicado - que viven en el mismo espacio, guiados por el mismo Estado, pero con una profunda desigualdad en los  derechos. Lo que aquí se perfila es una suerte de apartheid del siglo 21”. 

Saeb Erekat, secretario general de al Organización para la Liberación de Palestina  (OLP) recibe favorablemente el comunicado de los expertos de la ONU, que representa un recordatorio “de las responsabilidades que competen a la comunidad internacional” y de la “gravedad de la situación”. Una fuente diplomática israelí, detrás del anonimato por no estar autorizada a hablar con la prensa, responde que la declaración “no colabora en nada para ayudar a hallar una solución al conficto o para crear un diálogo constructivo entre las partes".