Covid-19, cientos de chinos clandestinos en Laos, por el juego o en busca de trabajo

La mayor parte corresponde a turistas que ingresaron para dirigirse a los casinos del Triangulo de Oro. También hay grupos de 20, 30 o 50 personas que cruzaron la frontera de manera ilegal, violando la obligación de permanecer en cuarentena. Además se constatan ingresos irregulares provenientes de Myanmar. Al día de hoy, Laos tiene 20 casos de Covid-19 y no hay víctimas. Una nación “ejemplar”, según la OMS.

 


Vientián (AsiaNews) - En los últimos meses, las autoridades de Laos arrestaron y deportaron a cientos de ciudadanos chinos que habían ingresado ilegalmente, para eludir el período de cuarentena obligatoria de 14 días, una de las normas para hacer frente a la pandemia de nuevo coronavirus. En la denuncia, que fue difundida por Radio Free Asia (RFA), según sus fuentes, la mayor parte de los ingresos corresponden a turistas - y, en parte, a trabajadores - que se dirigían a los casinos o a locales clandestinos de la provincia de Bokeo, en el noroeste del país, ubicados en la Zona económica especial del Triángulo de Oro. Este área, más conocida como la “colonia china”, se caracteriza por la presencia de numerosos locales de juegos de azar y lugares de entretenimiento.

Para eludir la cuarentena obligatoria, los visitantes del país del Dragón - incluso hay grupos de 20, 30 o 50 personas - evitaron los principales pasos fronterizos, recorriendo caminos alternativos o sorteando los confines por río, a bordo de pequeñas embarcaciones. Esto se posible porque Beijing y Vientián comparten una extensa frontera de 420 km y en muchos puntos, ésta es fácilmente penetrable. 

“En el solo mes de julio, alrededor de 300 ciudadanos chinos sin pasaporte se colaron en la provincia de Luang Namtha”, informa un miembro del equipo especial (task force) de la provincia, abocado al Control y prevención del Covid-19. Los clandestinos, agrega, “se dirigían a los casinos de la provincia de Bokeo”. “Llegaron a través de caminos alternativos - prosigue -, sin pasar por los puestos de control fronterizos”. A su arribo a Luang Namtha, “se reunieron con intermediarios que los llevaron hasta Bokeo”. Al ser descubiertos por las fuerzas del orden, fueron sometidos a tests de diagnóstico del nuevo coronavirus; todos resultaron negativos. 

“En julio, cerca de 38 ciudadanos chinos indocumentados viajaron a bordo de un buque de carga. Cada uno pagó hasta 2.000 yuanes (aprox. 287 dólares) al operador turístico”, subraya un miembro del comité provincial de lucha contra el coronavirus, en Bokeo. Los miembros de estos grupos no ingresaron para visitar locales de juegos de azar, sino que vinieron en busca de trabajo. “Dijeron que querían hallar un empleo en el Triángulo de oro. Fueron deportados el primero de agosto pasado”.  

La misma suerte corrieron 19 ciudadanos chinos más, localizados en la provincia de Bokeo el primero de julio, y posteriormente repatriados. Cabe destacar que los chinos no son los únicos que cruzan la frontera de manera ilegal. Según informa el equipo de tareas especiales, en el mes de mayo descubrieron y detuvieron a 30 ciudadanos de Myanmar. Y en las semanas posteriores, en la Zona económica especial, arrestaron a otros 184 birmanos indocumentados, que fueron repatriados .

A principios de julio, el gobierno de Vientián había anunciado la reapertura de los casinos y casas de juego, bajo la condición de respetar el distanciamiento social en los establecimientos. Al día de hoy, el país del sudeste asiático registra 20 casos de Covid-19 y no hay víctimas. En junio, los líderes del Partido Comunista declararon el país “libre de virus”, con la recuperación del último de los 19 casos registrados hasta ese momento. La Organización Mundial de la Salud ha elogiado abiertamente a la nación, porque supo contener la pandemia de un modo “ejemplar”.