Washington: Los institutos Confucio son ‘misiones extranjeras de propaganda’

Para el departamento de Estado promueven la agenda global del Partido comunista chino. Las universidades que los hospedan están bajo presión para no avergonzar a Beijing. Los centros de cultura ofrecen una visión “parcial” de China y son acusados de espionaje industrial. Observadores occidentales: Amenazan la libertad de expresión y pensamiento. El problema de Italia

 


Beijing (AsiaNews) – Para el gobierno de los EEUU, los Institutos Confucio son “misiones extranjeras de propaganda”. Lo anunció ayer el secretario de Estado, Mike Pompeo, según el cual la organización cultural china- controlada y financiada por el gobierno y símbolo del soft power del gigante asiático- y comprometida en promover la agenda global del Partido comunista chino (PCC) en las universidades estadounidenses.

La restricción sobre los institutos Confucio, que ofrecen programas de aprendizaje de la lengua y de la cultura china, llega en un momento de crecientes tensiones entre las dos superpotencias. La administración Trump continúa acusando a Beijing de miras expansionistas en Asia oriental y sudoriental, de realizar prácticas comerciales incorrectas, de robar secretos industriales y tecnológicos y de violar los derechos humanos internamente y en Hong Kong. El inquilino de la Casa Blanca además culpa a China por la pandemia de Covid-19-

En base a las nuevas disposiciones, el equipo de los institutos en territorio estadounidense, deberá registrarse y respetar limitaciones similares a aquellas previstas para el personal diplomático. La misma disposición fue adoptada en los meses pasados para los periodistas de 9 medios del Estado chino.

Según Washington, los entes chinos de cultura ejercitan presiones sobre las universidades que-detrás del pago de mucho dinero- los hospedan, tratando de censurar discursos y noticias considerados sensibles a la dirigencia de Beijing.

De varios lados se nota que los institutos ofrecen una visión “parcial” de China y de sus autoridades. En las lecciones no se afrontan temas como la masacre de Tiananmen, la opresión contra los uigures y de los tibetanos, la batalla por la democracia en Hong Kong y en la misma China y la independencia de hecho de Taiwán. 

Dadas las relaciones con el gobierno y las grandes compañías de Estado chinas, los centros Confucio también son acusados de espionaje industrial. Por el riesgo de perder datos sensibles y secretos relacionados con la propiedad intelectual, decenas de universidades estadounidenses ya cortaron la relaciones con la institución.

En los Estados Unidos hay por el momento 75 institutos Confucio: 548 en todo el mundo. Muchos observadores occidentales, académicos y no, creen que el ente cultural chino representa una seria amenaza a la libertad de pensamiento y expresión en campo educativo.

El debate está surgiendo también en Italia, donde están presentes 12 centros, hospedados en diversos ateneos. Para diversos académicos, la falta de toma de posición de los sinólogos italianos sobre la represión en Hong Kong y en el resto de China, confirma que los institutos educativos relacionados con el PCC influencian y condicionan las acciones de las universidades con las cuales colaboran.