Karnataka: la venta de capullos de seda, golpeada por la pandemia
de Nirmala Carvalho

Con el lockdown, se redujo la demanda del mercado interno y del exterior. Los precios se derrumbaron entre un 60 y un 70%, y registran la caída más drástica de la última década. El sector textil emplea a 45 millones de personas en todo el país. Las autoridades locales intervienen, otorgando subsidios a los productores. 

 


Bengaluru (AsiaNews) – La pandemia de coronavirus pone en serias dicultades a los sericicultores indios. Según informa el People’s Archive of Rural India, el confinamiento obligatorio y las restricciones impuestas por el gobierno para combatir el Covid-19 han sido un duro golpe para los productores, vendedores y tejedores que trabajan con la seda. La cadena de abastecimiento se quebró, y la baja demanda desató un derrumbe de precios de entre un 60 y un 70%. De 450-480 rupias (5,2-5,6 euros), el precio de la seda cayó a 150-160 (1,7-1,9 euros) por kg.

El rubro textil es clave para la economía india. Según la India Brand Equity Foundation, el sector emplea a casi 45 millones de personas, contribuye en un 7% a la producción industrial, y representa el 2% del PIB. En el 2019, las exportaciones del sector generaron ganancias por 31,3 millardos de euros, que equivalen al 15% de los ingresos derivados de las exportaciones a nivel nacional. 

La crisis es muy visible en el mercado de Ramanagara (Karnataka), uno de los más importantes de Asia para la venta de capullos se seda. Los agricutores de todo el Estado se reúnen aquí para vender sus productos. El establecimiento permanece abierto las 24 horas, ya que muchos campesinos acuden al lugar de noche, para participar de la subasta del día siguiente. 

El vicedirector del mercado, Munshi Basaiah, explica que, en promedio, se venden entre 35 y 40 toneladas métricas de capullos por día. Karnataka aporta casi un tercio de la seda producida en la India, el principal productor mundial del preciado tejido, después de China. La caída en las ventas se debe principalmente a la postergación o cancelación de matrimonios y de otros importantes eventos sociales en todo el país.  

Hemanth PR tiene 33 años y es un agricultor de segunda generación, oriundo de Ramanagara. Su familia produce capullos de seda desde hace más de 30 años. Él dice que esta es la caída de precios más drástica que se haya visto en la última década. Desde el primero de abril, el gobierno de Karnataka sostiene al sector con un subsidio de 50 rupias por cada kilo de capullos vendido. Las autoridades locales esperan que cuando pase la emergencia la situación se estabilice; por ahora, los que se dedican al cultivo de la seda deben hallar medios alternativos para sobrevivir y alimentar a sus familias.