Covid, Israel entregará un excedente de vacunas a los países ‘amigos’ y a los palestinos

Una parte será destinada al personal sanitario de la Autoridad Palestina. República Checa, Honduras y Guatemala figuran entre los posibles beneficiarios. La decisión es materia de un enfrentamiento político: Gantz acusa a Netanyahu de comportarse como si estuviera "dirigiendo un reino, no un Estado".


Jerusalén (AsiaNews/Agencias) - El gobierno israelí tiene el primado mundial en cuanto a niveles de inmunización contra el Covid-19 se refiere, y acaba de comunicar su intención de donar una cantidad "limitada" y "no utilizada" de dosis a terceros países y a los palestinos. Entre las naciones que podrían beneficiarse se encuentra Honduras, que próximamente abrirá su embajada en Jerusalén. 

Gracias a un acuerdo con Pfizer-BioNTech (y Moderna), Israel ha podido administrar al menos una dosis de la vacuna al 50% de la población, es decir, a nueve millones de personas. Tres millones de ciudadanos (un tercio) ya han completado el programa de inmunización, tras recibir las dos dosis. 

En una nota publicada por el gabinete del Primer Ministro Benjamin Netanyahu, se afirma que "Israel ha recibido numerosas peticiones de ayuda de naciones que solicitan vacunas". Si bien todavía no puede garantizar una ayuda "significativa" antes de completar la campaña de vacunación, es posible que se envíe a otras naciones una "cantidad limitada" de dosis "no utilizadas" y "acumuladas el mes pasado". Entre los beneficiarios, figuraría el personal sanitario de la Autoridad Palestina. 

Un envío "simbólico" que también podría beneficiar a Guatemala, país que abrió su embajada en Jerusalén el año pasado y espera 5.000 dosis. En una situación similar se encuentra Honduras, país que no ha comenzado con la campaña de vacunación y desearía recibir una parte del excedente. Entre los que ya han recibido las dosis se encuentra la República Checa, cuyo Primer Ministro quiso agradecer a su homólogo israelí el "regalo" con vistas a la apertura de la representación diplomática en Jerusalén, en el mes de marzo.

En las últimas horas, la iniciativa devino materia de debate político: el ministro de Defensa (y rival de Netanyahu), Benny Gantz, acusa al primer ministro de "hacer negocios" con las "vacunas que están destinadas a los ciudadanos israelíes" y de comportarse como si estuviera "al frente de un reino, no de un Estado".

A principios de mes, Israel había anunciado el suministro de unas 5.000 dosis de vacunas a los palestinos, para inmunizar al menos a una parte de los trabajadores sanitarios que batallan en primera línea contra la pandemia. Anteriormente, la decisión de marginar a los palestinos y de no incluirlos en el plan de vacunación masiva había suscitado una gran controversia,  y el cruce de acusaciones en virtud de los convenios internacionales.

La semana pasada, el gobierno de Netanyahu autorizó la distribución de mil dosis de la vacuna rusa Sputnik en Gaza. Según las Naciones Unidas y varias ONG pro derechos humanos, dado que Israel es una potencia "ocupante", tiene la "obligación", de "proporcionar" vacunas a los 2,8 millones de palestinos de Cisjordania y a los dos millones de habitantes de la Franja de Gaza, sometida desde hace tiempo a un duro bloqueo comercial.