Chhattisgarh, celebración dominical interrumpida por extremistas hindúes
de Nirmala Carvalho

En la ciudad de Raipur, una turba de nacionalistas atacó a la comunidad del pastor Firoz Bagh acusándolo de falsas conversiones y fue detenido durante varias horas por la policía. Él explica: "Somos una organización registrada, predico desde hace 20 años. Ahora quieren detenerme y amenazan a mis fieles".


Mumbai (AsiaNews) - El 4 de julio se produjo en Raipur, en el estado de Chhattisgarh, un nuevo ataque contra una comunidad cristiana por parte de extremistas hindúes. El pastor Firoz Bagh, de la misión evangélica de Santo Tomás, estaba dirigiendo la oración en su casa, como viene haciendo desde hace dos años. A la celebración asistían cerca de 30 personas, respetando los protocolos por el covid. Alrededor de las 8.30, mientras el pastor estaba predicando, unos 35 extremistas de la derecha nacionalista rodearon la casa gritando consignas contra los cristianos. Uno de ellos llamó a la policía, quien detuvo al pastor y lo mantuvo bajo custodia durante unas horas. Mientras tanto, la multitud de radicales hindúes fue creciendo y rodeó la comisaría gritando acusaciones de conversiones forzadas y amenazando con atacar al pastor. Ahora dicen que no le permitirán seguir dirigiendo encuentros de oración en esa zona.

El pastor Bagh explicó a AsiaNews: “Mi iglesia es una organización registrada, he predicado durante 20 años en un local alquilado y hace dos años compré esta casa. Muchas personas vienen aquí y nuestra puerta está abierta para todos. La palabra de Dios trae paz, esperanza y dignidad. Ahora me dicen que no puedo predicar aunque la India es un estado laico. Mis fieles están muy asustados, se sienten perseguidos por los extremistas”.

Sajan K George, presidente del Global Council of Indian Christians (GCIC) declaró a AsiaNews: “Condenamos enérgicamente estas acusaciones de falsas conversiones. La libertad religiosa es un derecho garantizado por la Constitución. El pastor Bagh solo estaba compartiendo la Buena Noticia, sin forzar a nadie: ¿qué hay de malo en eso? ¿Por qué la pequeña comunidad cristiana es la única amenazada por los extremistas y acosada por la policía? Pedimos protección para el pastor Bagh y sus fieles, que deben sufrir el miedo a un nuevo ataque”.