09/04/2015, 00.00
YEMEN-M.ORIENTE
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Aumenta el número de muertos en Yemen. Al- Qaeda promete oro a quien mate a los jefes chiíes

de Paul Dakiki
Desde el inicio del conflicto ya hay 600 muertos y más de 2.200 heridos. Falta la electricidad, el agua y remedios. Asesinados durante el servicio el personal para-médico de las ambulancias. Islamistas afganos prontos para invadir Yemen con “miles” de combatientes.

Beirut (AsiaNews)- Continúa a aumentar el balance de los muertos en la guerra iniciada por Arabia saudita y por las monarquías del Golfo contra los rebeldes Houthi de Yemen. Y  mientras los sauditas y los Emiratos tratan de polarizar a la Onu contra los rebeldes, encuentran como “aliados” hasta a Al-Qaeda, que puso una talla de 20 kg de oro sobre los jefes de la revuelta chií.

Ayer la Organización mundial de la salud (Oms) declaró que el número de los muertos desde el 26 de marzo hasta hoy era de 643; los heridos son 2,226. Los continuos bombardeos de la coalición guiada por Riad sobre Sana´a, Adén y cerca del estrecho de Bad al-Mandeb creó una nueva ola de prófugos: al menos 334 mil evacuaron hacia el interior del país; casi 255 mil escaparon al exterior.

La Oms afirma que “la situación humanitaria es crítica y se deteriora siempre más a causa de la falta de energía, agua y carburantes”. Además de esto, se registran ataques contra el personal sanitario: desde el inicio del conflicto 3 voluntarios para-médicos  fueron asesinados mientras prestaban servicio en las ambulancias.

Ayer en Adén, por primera vez del inicio de los enfrentamientos, la ong Médicos sin fronteras logró hacer llegar 2,5 toneladas de material sanitario. Una nave de la Cruz Roja, con material y personal médico en vez fue bloqueada a bordo, a causa de los combates. Ayer los Houthi han bombardeado el centro de Adén desde las colinas de los alrededores, provocando 22 muertos y 70 heridos entre la población civil.

La operación “Tempestad de firmeza” fue lanzada, por pedido del presidente Rabbo Mansour Hadi, depuesto por los Hoithi, que pedía una mayor coparticipación en el poder. Hasta ahora la operación prevé bombardeos apereos, pero tampoco se excluye una guerra por tierra.

Hace dos días las monarquías del Golfo han propuesto al Concejo xe Seguridad de la Onu, una resolución que pide sanciones contra los jefes rebeldes, Abdel Malek al-Houthi y el hijo del ex presidente, Ahmad Alí Abdallah Saleh. En el pasado los sauditas habían combatido contra los grupos de Al-Qaeda en la península arábiga. Hoy al-Qaeda parece estar “aliada” con los sauditas. Es de ayer la noticia que el grupo terrorista puso una talla de 20 kg de oro para cualquiera que “mate o capture” a Al-houthi o a Saleh, apoyados por el Irán chií.

El conflicto intra-yemenita se convirtió en un teatro de guerra donde se enfrentan las dos potencias regionales, Arabia saudita e Irán, sunnitas y chiíes, obligando a los países del área a tomar posición y declararse a favor de unos u otros. Además de las monarquías del Golfo, apoyan a la coalición saudita Jordania, Egipto, Turquía y Paquistán. Ayer los islamistas armados de Hezb-e-Islam, en Afganistán, propusieron el envío de “miles” de combatientes a Yemen para apoyar a la coalición sunnita.

El conflicto está dividiendo aún más el parlamento y los partidos libaneses con los Hezbollah que defienden a los Houthi y el partido de Hariri que defiende a Arabia saudita.

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