06/05/2019, 13.19
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Ayuno, oración y solidaridad: los musulmanes en el mundo celebran el inicio del Ramadán

El mes sagrado de ayuno concluirá el 4 de junio con la fiesta de Eid al-Fitr. Oficinas públicas y empresas reducen el horario de trabajo. Cotidiano saudita alaba los gestos de caridad de “musulmanes y cristianos”. Después de años de guerra, en Siria los mercados fueron invadidos por la gente. En Irán se teme el anuncio de nuevas sanciones de los EEUU.

 

Beirut (AsiaNews)- Más de un mil millones de musulmanes celebran hoy el inicio del Ramadán, el mes sagrado que el islam dedica al ayuno y a la oración con.variación de algunas horas entre las naciones en el mundo según el momento en el cual se puede ver la luna creciente. La Corte suprema saudita afirmó que “hoy 6 de mayo, es el primer día de Ramadán del año 1440”, con el astro a la vista- el procedimiento puede variar en base a las condiciones atmosféricas y a la distancia entre el sol y la luna en el horizonte- en diversas ciudades y áreas rurales del reino.

Junto a los sauditas, también los Emiratos Árabes Unidos, Bahrein, Siria, Egipto, Australia, Turquía, Indonesia y Marruecos-sólo para citar algunos- celebran hoy el inicio del mes sagrado para el islam. Primer día de ayuno y oración también para los musulmanes que viven en los EEUU y en Europa. El inicio varía en algunas horas en otras naciones entre las cuales India, Pakistán e Irán, cuna del islam chií.  

Por casi un mes los musulmanes se abstienen de comer y beber desde el alba hata el crepúsculo: prohibidos también el tabaco y las relaciones sexuales. El iftar, que rompe el ayuno, es la comida principal en el arco de 24 horas y se consume a la noche. Según la tradición en este mes Dios reveló el Corán al profeta Mahoma. El Ramadán se concluirá la noche del 4 de junio con la gran fiesta de Eid al-Fitr, caracterizada por celebraciones y banquetes, que se prolungará hasta la noche del día siguiente.

El período de ayuno y oración se abre con la observación de la primera parte de la luna nueva, que puede variar de nación en nación. Este es uno de los pilares (deberes) del islam junto a la peregrinación a la Meca, a la oración canónica, al testimonios de la fe y al dar limosna. Su institución data del segundo año de la “hégira” (622 d. C.), en correspondencia con la fuga de Mahoma de la Meca al oasis de Medina. La tradición quiere que el ayuno cotidiano comience en el momento que se logra distinguir un hilo blanco de un hilo negro.

Cada persona que superó la pubertad y es sana de mente y cuerpo debe cumplir el precepto. Están exentos cuantos tienen problemas psicológicos, los niños bajo la edad de la pubertad, los ancianos, los enfermos, los viajantes y las mujeres embarazadas, que amamantan o que apenas entraron en el ciclo menstrual. Quien no ayuna debe igualmente rezar y realizar cada día una obra de caridad hacia los pobres. Muchos padres hacen observar un ayuno veloz (media jornada).

En las naciones de mayoría musulmana, empresas y oficinas reducen el horario laboral y muchos restaurantes cierran durante el día. Las personas se saludan utilizando fórmulas tradicionales como “Ramadam Mubarak” y “Ramadan Kareem”, augurando al destinatario un mes “bendito” y “generoso”. Al mismo tiempo el mes sagrado en los últimos años evidenció elementos que poco tienen que ver con la fe, sino más bien con el comercio y los negocios, con características publicitarias y compras y pasar la noche en hoteles lujosos.

Presentando el inicio del Ramadán, el cotidiano de Arabia Saudita, Arab News subraya que en este período hay una mayor “unidad y cercanía” y que “musulmanes y cristianos promueven gestos de caridad, entre los cuales banquetes (para los más pobres) al exterior de las mezquitas”. En Egipto los niños encienden pequeñas linternas (fanoos) y entonan cantos tradicionales, mientras que los padres decoran calles y plazas, además de preparar comidas tradicionales del período. En Indonesia, nación musulmana más poblada del mundo, los niños visten ropas tradicionales, participan en procesiones y cantos en el día del inicio del mes de ayuno.  

No obstante la guerra, en Siria los mercados son invadidos por las familias para comprar comida o bebidas tradicionales, como el té. Entre las tradiciones está la hakawati, que deriva de la palabra “historia” y consiste en contar historias, mitos, fábulas y pasos del Corán. En el vecino Líbano, si bien el 40% de la población es cristiana el mes del Ramadán involucra a toda la población, con Ong y grupos de activistas que promueven iniciativas comunes de caridad, como la distribución de comidas afuera de las mezquitas e iglesias. En Irak, después de años de toque de queda nocturnos, la calles (adornadas) están volviendo a estar llenas de personas; las cuales preparan las comidas tradicionales, participan en los juegos y degustan bebidas y comidas dentro de los locales.  En Irán, al contrario, se hacen sentir las consecuencias de las sanciones americanas que están afectando cada vez más a la población, empobreciéndola. Además, según alguna voces provenientes de Washington, el presidente Donald Trump está lista para anunciar nuevas medidas contra la República islámica en concomitancia con la fiesta, como ya sucedió en otras ocasiones. Una situación que está convenciendo siempre más a los iraníes sobre la “evidente hostilidad” del gobierno de los EEUU contra ellos.

 

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