Beirut, explosiones en el puerto: avanzan 1400 denuncias exigiendo la verdad de los hechos

de Fady Noun

HRW critica la investigación que, de momento, parece estar estancada y muestra vicios de procedimiento. Los familiares de las víctimas piden justicia y condenan la "ley del silencio" que "encubre este drama". La iniciativa del Colegio de Abogados para intentar desbloquear la investigación. Piden que se apoye al fiscal en la búsqueda de la verdad.

Beirut (AsiaNews) - Los activistas de Human Rights Watch (HRW) arremeten contra la justicia libanesa y subrayan que a seis meses de los hechos, aún queda mucho por hacer para esclarecer la dinámica y las responsabilidades de la tragedia ocurrida en el puerto de Beirut el 4 de agosto del año pasado. Las investigaciones a nivel local están paralizadas y hay vicios de procedimiento que podrían llevar al fracaso de cualquier intento de arrojar luz sobre un asunto con muchas facetas oscuras. El fiscal acusó al primer ministro saliente y a tres ministros de negligencia, pero desde hace semanas no hay avances en las investigaciones. Desde distintos ámbitos se elevan los reclamos que piden una investigación independiente, en medio de acusaciones y vetos cruzados.

Más de doscientos muertos y seis mil heridos, de los cuales algunos quedarán discapacitados. Cientos de miles de vidas destrozadas, negocios destruidos y hogares devastados. ¿Acaso vamos a dejar que un manto de olvido, ignorancia y silencio culpable cubra esta inmensa tragedia del 4 de agosto en el puerto de Beirut?

El cardiólogo Nazih Adem no puede descansar. Es el padre de Krystel, quien fue llevada por la doble explosión en la flor de la vida. Independientemente de su esperanza de que algún día se llegue a la verdad de los hechos, piensa que su silencio sólo sería "una connivencia con el crimen" que tuvo lugar. "Nuestros muertos sólo estarán realmente muertos si los olvidamos", añade el Dr. Adem, citando de memoria a Jean d'Ormesson. "Quiero saber quién mató a mi hija. Ella no eligió morir como mártir. Murió en su propia casa".

Siente compasión por los bomberos que desaparecieron en el lugar de las dos explosiones: fueron enviados por sus superiores, pese a que sabían perfectamente que serían enviados a una muerte segura. "Vi con mis propios ojos a soldados heridos o tendidos en el suelo en la base naval de Beirut. ¿No tienen a nadie que pueda reclamar la verdad y la justicia por ellos?", se pregunta el médico. Y recuerda que, desconcertado, tras colocar el cuerpo sin vida de su hija en una ambulancia que se abría paso por los devastados barrios del puerto, corrió de morgue en morgue en un intento de volver a ver su rostro angelical por última vez.

Seis meses después, como cientos de miles de libaneses, el Dr. Adem denuncia "la ley del silencio que encubre este drama e impide que la verdad salga a la luz". El Líbano se ha convertido en "la tumba de la verdad".

Todos los medios de defensa de Beirut

Ante esta desgracia, el presidente del Colegio de Abogados, Melhem Khalaf, aprieta los dientes. Familiarizado con las acciones humanitarias, reaccionó rápidamente ante la tragedia y puso los recursos del Colegio de Abogados a disposición de una causa que considera de "alcance nacional". Así fue como se presentaron cientos de demandas, gracias al esfuerzo conjunto de abogados, colectivos (Agenda Legal, Mouttahidoun) y del Colegio de Abogados que acabaron en la mesa del juez Fadi Sawam, encargado de instruir el expediente por el Tribunal de Justicia.

Un esfuerzo que no resulta indiferente. Actualmente, el Colegio de Abogados tiene en sus manos, de forma gratuita, una cartera de 1400 casos individuales contra "personas desconocidas" por pérdida de vidas, lesiones y daños materiales. Sin embargo, de estos expedientes, actualmente sólo 120 están completos y han sido enviados al juez Sawan, encargado de la investigación. Los demás expedientes aguardan ser completados con documentos oficiales, informes periciales, estimaciones de peritos, fiscales, etc.

Por otro lado, hay que tener en cuenta que el Colegio de Abogados no suele hacerse cargo de los expedientes de las compañías de seguros. Son pocas las que indemnizan a sus clientes y la mayoría de ellas, explica el presidente del Colegio de Abogados, está esperando que se investigue con certeza esta tragedia.

El apoyo a Fadi Sawan

A los familiares de las víctimas que se manifiestan bajo la ventana del juez de instrucción, y le reprochan su presunta lentitud, Melhem Khalaf responde: "Debemos apoyar a Fadi Sawan. Es necesario un esfuerzo titánico, que a la vez requiere mucha sutileza. Ningún área del derecho queda fuera de la investigación y de las conclusiones que sometemos a su consideración. Pero él también se ve sometido a una enorme presión. No debemos dejarlo solo. Debe sentir la cercanía de la opinión pública, debe entender que hay un pueblo a su lado".

Al mismo tiempo, el presidente del Colegio de Abogados sigue oponiéndose firmemente a la idea de una investigación internacional. Uno de los nudos de la investigación más difíciles de desentrañar es saber cuáles fueron los medios que actuaron como detonantes de la masa de nitrato de amonio que estaba en el depósito y luego explotó.

La respuesta de la diputada Margaret Hodge

En cuanto a la verdadera identidad del propietario de la empresa Savaro, la que alquiló el carguero Rhosus, la diputada británica Margaret Hodge afirma que no escapará de la justicia si se establecen sus responsabilidades. Hasta la fecha, la supuesta propietaria, una empresaria chipriota llamada Marina Psyllou, ha admitido que no es la verdadera dueña, pero se niega a revelar la verdadera identidad de los directivos.

Dos pistas más

Una segunda pista en la que está trabajando el Colegio de Abogados, añadió Khalaf, es la cantidad de nitrato de amonio que explotó. El informe del FBI afirma que unas 500 toneladas de nitrato habrían saltado por los aires en la doble explosión. "Por tanto, debemos buscar 2250 toneladas", concluye el presidente de la asociación.

La cantidad de datos a disposición del juez Fadi Sawan permite aseverar que él está en condiciones de ofrecer cierta seguridad a los miles de demandantes que aguardan sus conclusiones. ¿A qué espera para avanzar en la investigación? "Es el momento de acabar con la impunidad, no debemos perder esta oportunidad", afirma la socióloga y antropóloga Carmen Aboujaoudé. La ola de asesinatos políticos que asoló el país a partir de 2005 está a punto de caer en el olvido. La justicia internacional nos ha decepcionado, como hemos visto con el Tribunal Especial para el Líbano (encargado de investigar el asesinato del ex primer ministro Rafic Hariri y que recientemente emitió su veredicto). Con la tragedia del puerto, todo un país tiene la oportunidad de redimirse, de recuperar su dignidad, exigiendo que los criminales rindan cuentas. Debemos aferrarnos a esta oportunidad única que se nos ofrece para hacer justicia".