Católicos y musulmanes unidos en el luto, después del estrago de los ismaelitas chiíes en Karachi

de Jibran Khan – Silent Thinker

La Comisión Justicia y Paz de la Iglesia paquistaní condena con firmeza el ataque. Celebrados los funerales de las 47 víctimas. Las escuelas católicas del Sindh han anunciado 3 días de luto. Líder chiíta: “Emergencia, seguridad, gobierno y fuerzas del orden deben proteger a todas las minorías”.

Karachi (AsiaNews)- “El asesinato de personas inocentes en base a su fe es inaceptable. El gobierno debe investigar sobre el ataque y llevar a los culpables delante de la justicia”. Es el comentario en caliente de la Comisión nacional de Justicia y Paz (Ncjp) de la Iglesia católica paquistaní al atentado terrorista contra un autobús de ismaelitas chiíes, sucedido el 13 de mayo pasado en Karachi (provincia del Sindh). Realizado por extremistas cercanos al Estado islámico (EI), el ataque mató a 47 personas. El líder chiíta de las comunidades ismaelitas y hazara han manifestado un “profundo shock” por cuánto sucedido.

Ayer Paquistán ha observado una jornada de luto nacional, mientras en el Al Azhar Garden Jamaat Khana- lugar de culto de los ismaelitas en Karachi- fueron celebrados los funerales de masa de las víctimas.

En el autobús viajaban entre 60 y 65 personas. Asfar Wala, de 48 años, uno de los sobrevivientes, cuenta: “Estábamos dirigiéndonos a Aisha Manzil, cuando el autobús fue rodeado por 5 o 6 motocicletas. Nos encontrábamos en una zona aislada. Los terroristas subieron por la puerta posterior”.

“Primero-explica- mataron al conductor. Luego nos pidieron que nos arrodilláramos y miremos al suelo. Los terroristas, uno de los cuales sin barba, pusieron de lado a dos niños y luego dispararon sobre los otros. A este punto me escapé”.

Las instituciones católicas del Singh han proclamado 3 días de luto, para expresar solidaridad a las víctimas. El p. Nasir John, sacerdote de Karachi, condena el incidente. “Nosotros estamos con la comunidad ismaelita, este es un ataque a la integridad de Paquistán. Nadie está al seguro en Paquistán, cualquiera puede matar. Llegó el momento en que la nación tome en serio la cuestión de la seguridad”.

“Este ataque-declaró Karim Aga Khan, líder de los chiítas ismaelitas- representa un acto insensato de violencia contra una comunidad pacífica. Mis pensamientos y mis oraciones son para las víctimas y las familias de aquellos que fueron asesinados y heridos en el ataque”.

En este momento 150 mil chiítas ismaelitas viven en Paquistán, la mayor parte de los cuales en la ciudad de puerto de Karachi. AsiaNews trató de contactar a diversos líderes de la comunidad, pero todos rechazaron hacer comentarios, explicando que “los ancianos de la comunidad nos han prohibido hacer declaraciones públicas”. Sin embargo Barkat Ali Khwaja, líder ismaelita de Jati (Sindh), aceptó responder a algunas preguntas.

“Estamos preocupados por esta tragedia-afirma el hombre a AsiaNews- que es la última de una serie de actos terroristas violentos y inexcusables. Apreciamos la respuesta del gobierno que debería trabajar junto a los líderes políticos y a las fuerzas del orden para educar la población y poner el interés nacional en primer lugar”.

De hace tiempo Paquistán es teatro de conflictos entre sunnitas y chiítas, que se intensificaron en el año 2011 después de un ataque similar sucedido en el distrito de Mastung (provincia de Balochistán). En la balacera murieron 26 peregrinos chiítas de la comunidad hazara. A causa de símiles episodios, en los últimos 2 años fueron prohibidas las peregrinaciones de y para Irán, sin guardias de seguridad acompañándolos.

Abdul Khaliq Hazara, presidente del Hazara Democratic Party, definió el atentado de Karachi como una “genocidio de los chiíes” y pidió al gobierno que agregar el National Action Plan también a Karachi y en Quetta. El plan nacional anti-terrorismo fue presentado en el año 2014, después del atentado talibán a la escuela militar de Peshawar, en el cual murieron más de 40 personas, la mayor parte eran niños.

“Hemos asistido a demasiadas barbaries- agregó el líder político hazaro- los terroristas vienen y atacan en modo abierto. Esto no pone las preguntas sobre la eficacia del National Action Plan y sobre las intenciones de nuestros políticos. Las fuerzas del orden deben hacer más para proteger a las comunidades más vulnerables, incluidas la cristiana”.