23/10/2017, 16.12
BANGLADESH - VATICANO
Enviar a un amigo

Misioneros: que el Papa Francisco infunda coraje en los cristianos bangladesíes, para salir y anunciar

En Dacca se aguarda la visita del pontífice del 30 de noviembre al 2 de diciembre. Tienen la esperanza de que “el hombre que viene de lejos impulse a la comunidad cristiana a salir de sus casas y anunciar el Evangelio”. Que los cristianos bangladesíes “sean más misioneros entre la gente”.

Dacca (AsiaNews) – Que la visita del Papa Francisco a Bangladesh “infunda en la pequeña comunidad cristiana el coraje de salir de su propia periferia y que torne a la Iglesia realmente misionera, a través de una evangelización que no esté enfocada en los grandes números, sino en la calidad del anuncio del Evangelio”. Es lo que esperan dos sacerdotes misioneros que viven en Bangladesh. Ellos cuentan a AsiaNews cómo la población, tanto cristiana como no cristiana, han recibido la noticia del viaje del pontífice. Si para los cristianos la visita en un “gran reconocimiento de su fe”, para el resto de la población, el “Papa Francisco sigue siendo un personaje desconocido”. Por eso, lo que ellos esperan, subrayan, es que este viaje “impulse a los cristianos, que son en su mayoría tribales, a dejar de estar encerrados en sí mismos, y a difundir el mensaje de Cristo”.  

En Dacca, se espera la visita del Papa Francisco del 30 de noviembre al 2 de diciembre de 2017. En todo el país, se están desarrollando retiros de oración, celebraciones litúrgicas y plegarias especiales para “preparar el espíritu” para este gran evento. El Pbro. Michele Brambilla, superior regional del PIME en Bangladesh, habla de las comunidades tribales que residen en el norte del país. Él espera que los católicos locales “se den cuenta de que hay una Iglesia, de que no están solos, confinados en sus diócesis.  Por el contrario, que hay una Iglesia que va más allá del Bangladesh, compuesta de muchas realidades, a veces incluso más sufrientes que la de Bangladesh”.  

Como misionero, continúa el padre Brambilla, “espero que sean más valientes en el testimonio del Evangelio. Y que salgan de sus comunidades, de sus casas”. En el norte, explica “los tribales permanecen encerrados en sí mismos. Hay una falta de evangelización indirecta: esto se deriva del hecho de que los católicos santhal [grupo aborigen, ndr] utilizan su propia lengua en la liturgia. Por ende, para un musulmán resulta difícil comprender qué están diciendo”.

El P. Brambilla espera que “ellos comprenda que, así como el Papa Francisco viene a encontrarse con ellos, también los cristianos pueden hacer lo mismo por la Iglesia bangladesí. No debe ser sólo el Papa quien se dedique a ‘salir’ para ir a las periferias, sino que también las comunidades locales deben ser misioneras. El trabajo no debe ser llevado a cabo sólo por el misionero o el cura, sino que es la comunidad en su conjunto la que evangeliza”. “Yo, como sacerdote –continúa- puedo ser el promotor en los pueblos, pero es la gente misma la que debe llevar el anuncio. Debe ser la gente la que lleva la fe”.

El superior general da un ejemplo: “Hay un pequeño pueblo en cual viven 15 familias cristianas, y 50 de otras confesiones. ¿Cuál es la razón por la que, después de 25 años, las demás familias no han percibido la belleza del Evangelio? Porque esa comunidad cristiana es frágil y no se la oye difundir el cristianismo. El motivo es que ellos están rodeados de una mayoría islámica y sienten temor del fundamentalismo; pero también porque decir abiertamente que se es fiel a Cristo crea tensiones y divisiones en la sociedad tribal”. A la luz de todo esto, “la esperanza es que el viaje del Papa Francisco pueda ser un ejemplo: un hombre que viene de tan lejos puede empujarnos a darnos cuenta de que podemos hacer lo mismo en el pueblo que tenemos cerca”.

En tanto, el Pbro. Franco Cagnasso, ex superior regional del PIME en Bangladesh, considera que el mayor desafío es hacer que la mayoría de la población musulmana pueda conocer al Papa Francisco, que “no se sabe bien quién es, ni qué viene a hacer”. Para dar una idea de la confusión que hay entre las personas corrientes, cuenta: “Algunos me han preguntado: ‘¿El papa es el jefe de los católicos o de los baptistas?’ ¿Es el presidente de la República italiana o ustedes tienen un presidente aparte?’ Sólo las personas más instruidas saben quién es el Papa y que, históricamente, todos los pontífices siempre se han referido a la convivencia y al diálogo inter-religioso. El hecho de que el Papa Francisco se haya expresado sobre los refugiados Rohinyás es un punto a su favor en el imaginario colectivo”.  

En lo que concierne a las expectativas de los cristianos, afirma, “ellos están curiosos y contentos de poder conocer al Papa. Pero en líneas generales, aún no se sabe qué esperar del evento ni qué novedad real puede llegar a aportar al país.  Lo cierto es que no hay expectativas puntuales. La visión que compartimos es que hay una espera positiva, satisfacción y una sensación de orgullo por esta visita. El Papa dará visibilidad a la comunidad y dará a entender que en Bangladesh los cristianos existen”. La de Bangladesh, concluye “es una Iglesia pequeña, que tiende a encerrarse en sí misma. Sería bello que el Papa lograse dar un impulso de apertura evangélica, no tanto desde el punto de vista cuantitativo, sino [que me refiero más bien] a la coherencia evangélica en el testimonio”.  

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Card. D’Rozario: la visita del Papa a Dacca, una confirmación de la armonía inter-religiosa (Video)
28/08/2017 14:03
P. Brambilla: el 2017, entre el cuidado de los enfermos y la visita del Papa
19/12/2017 13:32
Dacca: mientras esperan al Papa Francisco, los católicos recuerdan la visita de Juan Pablo II
21/11/2017 10:55
Dacca, los católicos se preparan para recibir al Papa ‘alimentando el espíritu’
14/10/2017 10:00
Dacca: católicos, protestantes y musulmanes esperan con alegría al Papa Francisco
15/09/2017 14:24


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”