Moon: No habrá una nueva guerra en la península coreana

A los 100 días después de la entrada en el cargo, el presidente de Corea del Sur reitera su línea hacia Corea del Norte de apertura al diálogo y de sanciones. Cada opción militar (de los EE.UU.) necesitará el consentimiento de Seúl. Pyongyang debe detener la producción de armas nucleares. Las relaciones con Japón.

Seúl (AsiaNews) - El presidente surcoreano, Moon Jae-in ha descartado que la vía sea una nueva guerra en la península coreana, diciendo que Estados Unidos ha acordado no decidir cualquier acción militar sin el consentimiento de Seúl. También advirtió al Norte no exceder la "línea roja" en el uso de ojivas nucleares y misiles intercontinentales.

"Digo esto con confianza, no habrá ninguna nueva guerra en la península coreana", dijo el presidente en una conferencia de prensa esta mañana, con motivo de sus primeros 100 días en el cargo.

"Los Estados Unidos y el presidente Donald Trump están de acuerdo en discutir todas las opciones que podrían tomar con Corea del Sur, cualquier tipo de opción que se tome."

Las declaraciones de Moon siguen a una guerra de fuego de palabras entre Donald Trump y Kim Jong-un, en donde el primero prometió "fuego y furia" contra el Norte, mientras que el otro amenazaba con atacar la isla de Guam.

"Cualquier acción militar que se tome sobre la península coreana - reiteró Moon - requiere el consentimiento de Corea del Sur, a menos que sea tomada fuera de la península".

El líder de Corea del Sur también admitió que el Norte está cerca de una "línea roja". "Creo - dijo - que Corea del Norte está completando su desarrollo intercontinental misil balístico que puede llevar cabezas nucleares: esto marca una línea roja. Corea del Norte está cerca del punto crítico. Y para ello hay que evitar nuevas provocaciones de Corea del Norte".

"Si Corea del Norte continúa provocando - añadió - enfrentará a nuevas sanciones reforzadas aún más, que no las pondrá soportar."

A petición de los periodistas para hablar de las relaciones con Japón, Moon dijo que quiere mejorar las relaciones entre los dos países, a pesar de las heridas del pasado (las "mujeres de solaz", que se utilizaron para tener relaciones sexuales con los soldados japoneses y los coreanos enviados a campos el trabajo forzado), por la que pide una indemnización por las víctimas.