21/11/2016, 10.54
INDIA
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Obispos indios: Profundo dolor por las víctimas y heridos del accidente ferroviario en Uttar Pradesh

Secretario general de la Conferencia episcopal: Tragedia inaceptable, porque afecta al medio de transporte más utilizado por las personas comunes. El tren Indore-Patna se descarriló cerca de Kanpur. Quizás a raíz del quiebre de las vías. Hay cuando menos 133 muertos y 180 heridos. Las operaciones de rescate aún no han sido concluidas.  

Nueva Delhi (AsiaNews) – “Estamos realmente entristecidos por este trágico accidente”. Es lo que dice a AsiaNews Mons. Theodore Mascarenhas, secretario general de la Conferencia episcopal india (CBCI), al comentar el desastre ferroviario ocurrido ayer en las inmediaciones de Kanpur, en Uttar Pradesh. “Lo que ocurrió es todavía más grave – afirma – porque el ferrocarril representa el medio de transporte más utilizado por las personas comunes”. Por eso, en nombre de todos los obispos indios, él “ofrece sus más sentidas condolencias a las familias y a aquellos que han perdido su vida, y oraciones por el eterno descanso de los difuntos. Rogamos también por los heridos, a fin de que Dios Todopoderoso les garantice una recuperación total y rápida”

El desastre ferroviario sucedió ayer, y es uno de los peores de los últimos años. Cerca de las 3 de la mañana (hora local), el tren Indore-Patna se descarrilló estando cerca de Kanpur, por motivos que aún deben establecerse. Cientos de socorristas acudieron al lugar e inmediatamente comprendieron la gravedad de la situación: vagones incrustados uno sobre otro, partes de coches esparcidas por doquier, víctimas y heridos atrapados entre los fierros.

El saldo provisorio, que está destinado a aumentar, habla de 133 muertos confirmados y de 180 heridos, de los cuales 56 se encuentran en estado crítico. En el momento del descarrilamiento, a bordo del tren –uno de los tramos más abarrotados de India septentrional- había más de 2.500 pasajeros, que estaban sobre todo dispuestos en los primeros vagones, que se desintegraron a raíz del impacto.

La formación estaba compuesta por 14 vagones, muy probablemente viejos y en mal estado de mantenimiento. Si bien las causas del accidente aún deben esclarecerse,  los periódicos locales informan sobre la presencia de vías rotas, que habrían provocado el vuelco de los coches de la formación.

Mons. Mascarenhas pide que el “gobierno emprenda una investigación inmediata, para establecer las causas del accidente, y que adopte las medidas necesarias de modo que este tipo de tragedias no vuelvan a ocurrir nunca más”.

La India, que está en pleno boom económico, carece de mantenimiento y de inversiones a nivel de infraestructura, a pesar de que su red ferroviaria es la tercera del mundo en extensión.  A lo largo del tiempo se han verificado numerosos accidentes, todos ellos imputables a errores en la gestión de la maquinaria. En 1981, en Bihar, un tren descarriló y se precipitó sobre el río, provocando 250 muertos; en 1995 en Firozabad, Uttar Pradesh, un tren rápido chocó contra un tren detenido en las vías, cobrándose la vida de 358 personas; en 1999 al menos 290 pasajeros murieron al chocar dos trenes en Assam; en el 2010, en Bengala Occidental, descarriló el tren que cubre el trayecto Calcuta-Bombay, matando a más de 100 personas. 

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