Tacloban inaugura la ‘misa en el auto’, para prevenir los contagios de Covid-19

En las Visayas Orientales se registra un aumento de casos, y las personas temen contraer el virus. El Pbro. Kim Margallo ideó una forma de celebrar la eucaristía con la presencia de fieles pero de forma totalmente segura: las personas participan, pero permanecen en sus autos El obispo había pedido a los sacerdotes “iniciativas creativas”, orientadas “a la evangelización y a la pastoral”.

Manila (AsiaNews/CBCP) - En plena emergencia de coronavirus, que ha llevado al cierre de iglesias y lugares de culto en todo el mundo, un sacerdote filipino ha ideado ‘la misa en auto’, una nueva modalidad que permite que los fieles participen en la liturgia de una forma totalmente segura (ver foto). Desde lo alto de una plataforma construida para la ocasión, el padre Kim Margallo observa y bendice a sus parroquianos, que participan de la liturgia en 25 automóviles aparcados en el lugar.

Inspirándose en el auto-cine, una idea de los americanos que fue popular en el pasado, el sacerdote celebra la eucaristía para todos los católicos que no pueden participan en la misa en las iglesias y parroquias a causa de la pandemia de Covid-19, que sigue propagándose y dejando víctimas en las Filipinas. A causa del creciente número de casos en las Visayas orientales, las personas “tienen miedo de ir a misa, porque temen contraer el virus”, explica el padre Margallo.

En esta región, los últimos datos del ministerio de Salud registran 3826 contagiados (con un aumento de 67 en el último día), y 695 casos activos. “Creo que era el momento adecuado para esto - subraya -, ya que el número de casos de Covid-19 se ha disparado [en Tacloban] y las personas tienen miedo de salir de casa”.

Anteriormente, el arzobispo de Palo, mons. John Du, había impulsado a los sacerdotes a hallar “iniciativas creativas, orientadas a la evangelización y al ministerio pastoral en nuestras parroquias”, frente a una amenaza que no cesa de crecer. Bajo esta modalidad, las familias “pueden continuar participando en la eucaristía, reunidas, pero “cada una en su auto”. Un modo innovador de ser Iglesia en medio de la pandemia, pero sin violar las leyes y normas vigentes.

“Durante la comunión - cuenta -, la gente que participa en la misa permanece en su auto. Solo deben bajar la ventanilla, para permitir que un laico distribuya la comunión”.

En el mes de mayo, la parroquia de Nuestra Señora de Lourdes, ubicada también en Tacloban, había diseñado un “confesionario móvil”, para que las personas pudieran acceder a los sacramentos, especialmente los ancianos y enfermos. El sacerdote precisa, sin embargo, que el lugar de misas y celebraciones sigue siendo la iglesia, y que esta nueva forma de ministerio continuará mientras rija la emergencia. “Si bien seguimos transmitiendo nuestras misas online - concluye - no hay nada mejor que participar en una celebración eucarística de manera presencial ”.