Dharamsala (AsiaNews) - Las autoridades comunistas en el Tíbet han condenado hace
unos días a un grupo de 10 tibetanos que en 2012 habían denunciado a la policía
por haber abierto fuego contra civiles desarmados en el condado de Drango. Las
sanciones van desde 10 a 13 años de prisión, sin derecho a apelación. La sentencia
fue confirmada por el diario tibetano Phayul.
Los detenidos fueron identificados como Paldor, Namgyal, Sonam y Tashi Dhargay Dhargay
(13 años de prisión); Nyma y Chunhey (12 años); Kuntho y Ogyen Tsering (11 años);
Sherab Sangpo y Thinlay Dhargay (10 años). Todos ellos están encarcelados en Ranga.
Los hechos se remontan al 23 de enero de 2012, el primer día del Año Nuevo
chino, cuando cientos de tibetanos salieron a las calles en Drango exigiendo la
libertad para el Tíbet y el regreso del exilio del Dalai Lama. Los
manifestantes expresaban "el amor y la solidaridad" para aquellos que
sean auto-inmolado por la causa tibetana e invitar a "nuevas acciones de
boicot" durante el Año Nuevo Tibetano.
Llamados a la escena, los oficiales de la Seguridad Pública comienzan a detener
arbitrariamente a los presente. Las protestas de los presentes empujan a los agentes
de policía al borde del evento: para recuperar el control, disparan al nivel
del ojo contra la multitud. Al menos cinco personas murieron en el acto,
mientras que decenas de personas resultaron heridas.
Poco después, la llegada del ejército detuvo la lucha. Al menos 400 personas se
retiran y desaparecen durante semanas. Algunos, como los diez condenados en los
últimos días, no salen más de la cárcel. Para ellos, la acusación sería "subversión
del poder del Estado", ya que pidieron justicia por los hechos de Año Nuevo.