Católicos vietnamitas: en el Año de la Fe, la oración más fuerte que las persecuciones
de Thanh Thúy
Al menos 5 mil personas han participado en la misa de clausura del año indicado por Benedicto XVI, celebrada el 19 de octubre en Saigón. Presidió el rito el neo-coadjutor, junto al cardenal Pham Minh Man, obispos y sacerdotes. Antes del rito se hizo una oración común delante de la estatua de Nuestra Señora de la Paz.

Ho Chi Ming City (AsiaNews)- "Aún si vivimos en una sociedad represiva, [es confortante] nuestra oración incesante a la Virgen. Más son fuertes la persecuciones físicas y espirituales, mayor será nuestra fe en Dios y en la Virgen". Con este espíritu, nos cuentan a través de su testimonio un fiel, los católicos vietnamitas han participado a la misa de clausura del Año de la Fe, que se celebró el 19 de octubre pasado en la catedral de Ho Chi Ming City.

Celebró el rito el neo-auxiliar de Saigón, mons. Paul Búi Van Doc, que presidió la ceremonia junto al cardenal J.B Pahm Minh Man, también estaban presentes el representante pontificio mons. Leopoldo Girelli, el obispo auxiliar, el obispo de Long Xuyen mons. Tran Xuan Tieu y el obispo de Vinh mons. Paul Nguyen Thái Hop. Al menos unas cinco mil personas han participado de la santa misa, que fue la ocasión de una "presentación oficial" a la comunidad cristiana del nuevo obispo coadjutor.

Participando a la misa, los católicos vietnamitas han querido "agradecer" al Papa Francisco, por la gracia reservada a la Iglesia local con el nombramiento de nuevos obispos. Muchos han querido subrayar que "el rostro y el espíritu de Benedicto y de Francisco "están siempre en los corazones de los católicos vietnamitas". Un pensamiento especial fue dirigido al card. Pham Minh Man que también en este momento de dificultad, debido a su enfermedad es siempre testigo verdadero y auténtico de Cristo y de la iglesia. En los años su obra ha producido miles de catequistas y bautizado más de 20 mil personas.

Antes de la función en la catedral de Nuestra Señora el cardenal, los arzobispos, los obispos, sacerdotes y fieles han rezado delante de la imagen e la Virgen de la paz, en la homónima plaza de Hóa Binh, en centro de Ho Chi Ming City. Mons. Girelli envió un agradecimiento especial en nombre del Papa Francisco a todos los presentes, con un pensamiento particular al cardenal "cuya birreta roja" es signo viviente y continuo de "sacrificio". Un testigo profundo y valioso de la fe en Vietnam, que ha encontrado en su vida al Beato Juan Pablo II, Benedicto XVI y Papa Francisco, recibiendo de todos sus reconocimientos de estima y valor. Al final invitó a "continuar en la oración por el obispo coadjutor", al cual se le ha confiado el futuro camino de la arquidiócesis de Saigón.