Ataque talibán en un restaurante de Kabul: 21 civiles muertos
Las víctimas eran extranjeros y afganos , entre ellos el representante local del FMI y algunos funcionarios de la ONU . Los islamistas han reivindicado la autoría del ataque de inmediato, y explican que el objetivo era sobre todo los clientes de otras nacionalidades. La policía mató a los dos atacantes.

Kabul (AsiaNews / Agencias) - 21 víctimas en un nuevo ataque de los talibanes en Kabul que se llevó a cabo ayer por la noche, en un conocido restaurante. Entre ellos, 13 personas eran de nacionalidad extranjera - canadiense, ruso e inglés - y ocho afganos, todos civiles. Murió en el ataque también el representante local del Fondo Monetario Internacional (FMI): Nacido en el Líbano, el hombre llamado Wabel Abdallah, tenía 60 años y ocupó el cargo desde 2008. De las otras víctimas aún no se saben la identidad, pero cuatro parecen haber sido funcionarios de las Naciones Unidas.

El local es llamado La Taverna du Liban, está situado en el barrio de Wazir Akbar Khan - el más protegido, donde hay embajadas y organizaciones no gubernamentales internacionales - y es muy popular en la capital, sobre todo entre los extranjeros, empresarios y funcionarios afganos. Para confirmar esto también hay un mensaje enviado por Zabihullah Mujahed, portavoz de los talibanes, así como reclamar el atentado: el terrorista dijo que el objetivo era los clientes extranjeros del restaurante.
De acuerdo con la reconstrucción de la policía, uno de los terroristas se inmoló en frente del restaurante. Después de un breve tiroteo con las fuerzas de seguridad afganas, sus compañeros irrumpieron en la cocina del restaurante y comenzaron a disparar. Más tarde se les unieron los agentes, quienes los mataron.
El ataque se produce justo cuando las tropas de la OTAN (principalmente estadounidenses) se preparan para salir de Afganistán, después de más de diez años de guerra y ataques casi diarios. El presidente Hamid Karzai aún no ha dado el visto bueno a un acuerdo que prevé la reducción de la presencia de tropas extranjeras después de fines de 2014. La salida es también preocupación por la seguridad en vista de próximo mes de abril, cuando la población votará para elegir al sucesor de Karzai.