Kabul (AsiaNews/Agencias)- El gobierno de Afganistán ha anunciado que tratará de modificar la propuesta de ley que los activistas por los derechos humanos han descripto como una amenaza a la represión de la violencia contra las mujeres.
De hecho fue presentada ayer la propuesta de enmienda de la ley sobre el procedimiento penal, aprobada por el Parlamento el año pasado, allí donde se impide a los "parientes de los imputados" el poder testimoniar. Lo cual hace casi imposible perseguir los casos de abuso doméstico.
A tal propósito, el porta voz del palacio presidencial, Aimal Faizi, declaró que el gobierno decidió que el nuevo "Código sobre la acción penal no entrará en vigor sin que sea aprobada la enmienda". "esta ley no impedirá a cualquier pariente o a cualquier miembro de la familia el testimoniar contra otro miembro de la familia". "tendrá la libertad de hacerlo".
Según Manizha Naderi, director ejecutivo de la Women for Afghan Women, la falta de una modificación de la ley habría enviado una señal a los talibanes, mostrando, dijo a Al Jazeera, que el País estaba "preparando el retorno de ellos".
Heather Barr, investigadora de Human Rights Watch Afghanistan, expresó un cauto optimismo sobre la enmienda, agregando que igualmente era un caso interno de "un modelo más amplio de ataques" a los derechos de las mujeres por parte del gobierno afgano.