El Patriarcado caldeo y Caritas iraquí en ayuda a las familias musulmanas en fuga por las violencias.
de Joseph Mahmoud
Una delegación guiada por Mar Sako visitó la mezquita sunnita de Umm al-Qura, situada al oeste de la capital y distribuyo alimentos y remedios. Su Beatitud expresa "solidaridad" a los evacuados de Falluja y Ramadi, escapados de las milicias de Al Qaeda. Él invita a rezar a Dios "para que el País vuelva a la normalidad. Líder musulmán: "Fraternidad característica de los cristianos iraquíes".

Bagdad (AsiaNews)- "Vinimos para expresar nuestra solidaridad a nuestros hermanos evacuados de Falluja y Ramadi" y para "ayudarlos en su sufrimiento". Así su Beatitud Mar Louis Raphel I Sako, explicó el sentido de la iniciativa promovida en los días pasados por el Patriarcado caldeo, en colaboración con la Caritas iraquí. El 9 de marzo pasado una delegación cristiana visitó la mezquita sunnita de Umm al Qura, en la zona ste de Bagdad. Los que participaron ofrecieron alimentos, bienes de primera necesidad y remedios a más de mil familias de prófugos, en fuga de las violencias confesionales que han ensangrentado Falluja y Ramadi, ciudades del oeste del País, hoy bajo el control de Al Qaeda. Junto al Patriarca estaban presentes el obispo auxiliar de la capital mons. Shlemon Warduni, el p. Pios Qasha, el p. Albert Hisham y Nabeel Afram, director de sección loc al del ente caritativo cristiano.

"Nosotros cristianos-subrayó Mar Sako- no miramos a la persona según su identidad petnica o religiosa, sino como persona necesitada a la cual debemos dar una mano. Somos hombres de paz, en este país donde la gente emigra en circunstancias difíciles". Su Beatitud además pidió "que se rezara a Dios para que el País vuelva a su normalidad, sea restituido su prestigio de un tiempo y el gobierno pueda proteger a todos".

Ilustrando el sentido de la iniciativa de caridad promovida por los dirigentes del Patriarcado caldeo en colaboración con Caritas iraquí, Mar Sako luego agregó que esa "expresa la cohesión nacional, la humanidad y la ciudadanía que nos unen el uno al otro".

Nuestras casas y nuestras iglesias están abiertas a todos- prosiguió- estamos en el tiempo cuaresmal y este acto es un gesto de ayuda gratuita a nuestros hermanos musulmanes necesitados" Nuestro Señor Jesucristo, concluyó el Patriarca, "nos enseñó la solidaridad con los actos concretos, no solamente a palabras".

Recibió a la delegación cristiana en el lugar más importante lugar de culto musulmán sunnita de la capital, el líder Mahmmod Ali Ahmed Al- Falahi, exponente del Sunni Endowments en Bagdad. Agradeciendo al Patriarca caldeo, a la delegación y a todos los cristianos por "esta iniciativa fraterna", él agregó que el espíritu de ayuda recíproco, es la "característica de los cristianos de Irak". "Es una expresión visible de la hermandad- explicó el líder musulmán- y de la solidaridad", el cual desea que los iraquíes "permanezcan hermanos capaces de amarse el uno al otro". En este proyecto se coloca el deseo que se cree una comisión para el diálogo y la confrontación entre el Sunni Endowments y la dirigencia católica iraquí. 

En abril se realizarán las elecciones legislativas y la población teme un incremento de atentados. Desde la acida de Saddam Hussein en 2003, el 2013 fue para Irak el año más violento, superando también las violencias del bienio terrible 2006-2007. Según cifras del gobierno, en el solo mes de febrero fueron asesinadas más de mil personas en ataques que tenía como objetivos chiítas o gubernamentales. Quienes sufrieron las violencias en el País fue también la comunidad cristiana: antes de la invasión americana y la caída de Saddam Hussein los fieles eran más de 1 millón, mientras que hoy, según las estimaciones recientes, son sólo 300 mil.