Katmandú (AsiaNews)- En un mundo siempre más lleno de dificultades y peligros trabajan los buenos pastores", comprometidos en difundir la Palabra e Dio entre persecuciones y violencia: "Pensemos en cuántos viven impedidos en su ministerio por el gobierno chino, en la obra de aquellos que en India ayudan a los más débiles no obstante la oposición de los fundamentalistas hindúes; a quien permanece parado en las guerras de Siria y Ucrania. Ofrecemos a ellos grandes ejemplos de fe, nuestra oración". Lo dijo ayer el p. Andrew Pradhan, sacerdote nepalés, en la homilía pronunciada en la festividad del Buen Pastor en Katmandú.
La Iglesia católica, recordó el p. Pradhan, "ofrece a través de sus hijos e hijas tantos testimonios de amor, también en medio de guerras y violencias. Pensemos en todos ellos y tratemos de ser inspirados por ellos. Puedan su devoción y sus sacrificios siempre tensos a la ayuda del prójimo, ayudar a la Buena Noticia a todo el mundo". Durante la ceremonia, celebrada en la catedral de la Asunción, estaban presentes también algunos budistas: la comunidad católica ofreció una oración especial por el nuevo vicario apostólico, mons. Paul Simick.
Nabis Subba, fiel laico, dice: "Nuestro obispo tene la responsabilidad de proteger a los católicos y promover su rol en el País, pero debe pensar también en servir a quien tiene dificultades, sean fieles o no. También nosotros debemos ayudarlo, de modo de dar siempre en una mejor manera la bienvenida a aquellos que quieren unirse al catolicismo en nuestro país. Tenemos delante muchos desafíos, pero debemos expandir nuestro horizonte. Somos pocos en número, por lo cual van mejoradas nuestra cualidad y nuestra cantidad".