Sarajevo (AsiaNews) - Hay muchas formas de entender la "yihad" o
guerra santa que está ensangrentando Oriente Medio (Siria e Irak, en primer
lugar) y gran parte del norte de África y Asia Central. La
guerra de agresión contra los enemigos del Islam (musulmanes tibios y paganos
del Oeste) es sólo una de las interpretaciones, a pesar de que es la que hace
más noticias. El
"conflicto de interpretaciones" de este término muestra aún más la urgencia
que el Corán y el Hadith (los dichos del Profeta) estén sujetos a una
interpretación que no perjudique el núcleo religioso de la fe musulmana,
rechazando aquellas partes relacionadas con las experiencias históricas
del profeta Mahoma, en la lucha contra sus enemigos en Medina.
Es
este resumen de la primera conferencia internacional en la mañana del Oasis,
con el tema "La tentación de la violencia: religión entre guerra y reconciliación",
que este año se celebró en Sarajevo. Esta ciudad, como decía el
cardenal Vinko
Puljic, "ha sido testigo de tres guerras, "la Primera, la Segunda
Guerra Mundial, y la de 1992/95, que ha tenido aquí y allá caracteres de
"guerra religiosa" entre cristianos y musulmanes, y en la cual Sarajevo
- con el su
tejido inter-confesional- se ha convertido en la víctima emblemática.
Entre
la relaciones más significativas está la de la Prof. Asma Afsaruddin, profesor
de estudios islámicos en la Universidad de Indiana (EE.UU.). En
su cuidadoso estudio del Corán, ella demostró que de acuerdo con el libro
sagrado de los musulmanes, el término "jihad" siempre ha tenido un carácter
"ético y moral", de resistencia "estoica, no violenta" frente
al mal. También
en el período de Medina (el segundo período de Muhammad, según los estudiosos
del Corán), la referencia a la yihad sólo se hace "para la protección de
vidas y propiedades" en contra de los enemigos y el "contraataque debía
ser proporcional al ataque original".
Para la
profesora Afsaruddin es sólo en el período abbaside (siglos VIII - XIII) que el
tema de la jihad se convierte en una herramienta política que ofrece razones
religiosas para desear la expansión del califato. Pero
incluso entonces, como consecuencia, siempre habrá eruditos, pensadores y
figuras religiosas que afirman el carácter "interno" y la moral de la
yihad, que condena incluso el "martirio" como un medio para destruir
a los enemigos del Islam.
Otro
erudito, Mathieu Terrier, de la Ecole Pratique des Hautes Etudes de París,
mostró la evolución de la jihad en el mundo chií. La
persecución de Ali y sus seguidores, tras la derrota de Karbala (donde murió un
hijo de Alí, Hussein), conduce a una posición de quietismo y una interpretación
espiritual de la yihad, transfiriéndola a un horizonte apocalíptico, al fin de mundo,
cuando el Mahdi (Mesías), junto con Jesús (!), arcángeles y ángeles pondrá fin
a la maldad y los enemigos de Ali en modo justiciero y definitivo.
Como
es obvio en todos los presentes surgió la pregunta: ¿cómo es que se ha
producido una manipulación del término jihad tan profundo, hasta que se
convierte en un símbolo de la actitud de tout
court del Islam hacia todo el mundo, una especie de guerra total, con el terror
de muchos islamofobos y aplaudido por los extremista musulmán?
Una
primera respuesta vino de la experiencia de algunos cristianos y musulmanes de
Sarajevo. Ellos
han advertido contra el uso que se hace del Islam "por razones políticas,
nacionalistas, económicas". Y
en Sarajevo, el Mufti Husein Reis-ul-ulema se ha comprometido a frenar y
corregir las interpretaciones wahabí (Islam radical de Arabia Saudita), en
nombre de la convivencia entre musulmanes, cristianos y agnósticos que conduzca
al bienestar de todos.
Una
respuesta desde el punto de vista cultural vino del islamologo p. Samir
Khalil Samir, quien asistió a la conferencia, quien dijo a Asianews que "la politización de la jihad es muy vieja y no
sólo del tiempo de los abasíes. Está presente en la vida de Mahoma. Unas
colecciones de dichos (hadith) del profeta son en sí mismas el llamdo
"Libro de las redadas", que enumera más de 60 guerras operadas por Mahoma".
"Si
- continuó - Mahoma es 'el modelo por excelencia del creyente', entonces es
claro de inmediato que la jihad ha llegado a ser como 'el sexto pilar del Islam'
" "Lo
que se necesita es una exégesis del Corán, que salve el núcleo religiosos del
libro, y lo limpié de aspectos demasiado condicionados al período histórico en
el que Mahoma vivió, como sus luchas en el momento de Medina".