Zhejiang, otras 10 iglesias arriesgan ser demolidas: Cristianos dispuestos a combatir "hasta el final"
Un pastor cristiano del condado de Pingyang, anónimo a su pedido, explica que los fieles de al menos 3 iglesias están dispuestos a obstaculizar la obra de la policía. Desde el inicio de la campaña "Tres rectificaciones y una demolición" desde el inicio de enero, unas 360 iglesias o edificios cristianos con cruces visibles fueron demolidas o dañadas en la provincia.

Wenzhou (AsiaNews/Agencias)- Una nueva ola de destrucción amenaza a unas 12 iglesias de la provincia de Zhejiang, que han recibido un aviso de demolición que caduca hoy. El procedimiento está dentro de una campaña del gobierno contra aquellas que define como "estructuras ilegales". Un pastor cristiano del condado de Pinyang, que desea quedar en el anonimato, explica que los fieles de al menos 3 iglesias están listos para combatir "hasta el final" contra las demoliciones de los lugares de culto.

El pastor explica que los avisos fueron enviados el pasado 15 de junio y que caducan en la jornada de hoy. "Haremos guardia seguramente a nuestras iglesias". No fue posible saber si las iglesias eran las oficiales y aprobadas por el gobierno o las iglesias domésticas sin autorización.

Al mismo tiempo, las congregaciones de Pingyang han publicado una carta abierta para dar voz a sus preocupaciones en lo que se refiere a la campaña siempre más agresiva y dirigida a la destrucción de los edificios de culto. "La remoción de las cruces de algunas iglesias causó pánico enorme en los casi 100 mil fieles, y desencadenó tantos comentarios en la sociedad. Nos han obligado a preocuparnos".

Según China Aid, desde el inicio de la campaña. "Tres rectificaciones y una demolición" al inicio de enero pasado., unas 360 iglesias y edificios cristianos con cruces a la vista en la provincia de Zhejiang fueron demolidas o dañadas. Frente a las acusaciones de persecución religiosa, los funcionarios el gobierno local responden diciendo que la campaña toca sóla a aquellas estructuras "que violan los códigos de construcción".

Según un cristiano de Pingyang, también anónimo, la política religiosa de la provincia se convirtió "tan dura desde enero que es difícil para las iglesias obtener el permiso de ampliar las estructuras cristianas aunque ya se tenían los permisos necesarios y la propiedad de la tierra también".