Hiroshima, 69 años después de la bomba la población pide "paz" al Gobierno del Japón
Hoy el país se detuvo para celebrar el aniversario de la bomba atómica que, en 1945, cerró la Segunda Guerra Mundial. Los sobrevivientes de la tragedia, por primera vez caen por debajo de las 200.000 unidades. El alcalde de Hiroshima "clama" al primer ministro: "Hemos evitado la guerra gracias al noble pacifismo de nuestra Constitución." Arzobispo de Tokio: "no existen conflictos en nombre de la justicia."

Hiroshima (AsiaNews) - Decenas de miles de personas se reunieron esta mañana bajo la lluvia en Hiroshima para conmemorar el 69 º aniversario del bombardeo atómico realizado por los Estados Unidos en 1945. En la ceremonia, que se celebró en el parque "Memorial de la Paz", estuvieron presentes los más altos niveles del gobierno japonés, el Obispo. Thomas Manyo Maeda y representantes diplomáticos de 68 países. Durante su intervención, el alcalde de Hiroshima ha hecho un llamamiento específico al primer ministro, Shinzo Abe, presente en medio de la multitud: "Hemos evitado la guerra gracias al pacifismo de nuestra Constitución". La referencia es a la decisión adoptada por el Gobierno para reformar la Carta, eliminando de hecho el articúlo 9, el cual impone al Sol Naciente evitar cualquier forma de guerra de agresión.

Como cada año, el ayuntamiento también ha hecho sonar la "Campana de la paz" y el alcalde ha añadido al monumento que conmemora a las víctimas los nombres de los sobrevivientes que han muerto desde el pasado 6 de agosto. De estas personas - que llevan los signos y las enfermedades derivadas de la radiación nuclear - conocido en Japón como hibakusha y son muy respetados en el momento siguen vivos 192 719 sobrevivientes del ataque, y por primera vez, el número ha caído por debajo de las 200.000 unidades . Su edad media es de 79,44 años.

En el curso del ataque nuclear contra Hiroshima, 09 de agosto seguido por el bombardeo de Nagasaki, cerca de 140 mil personas murieron. De acuerdo con los aliados estas dos devastaciones fueron para acelerar el fin de la Segunda Guerra Mundial, ya que Japón siguió siendo el único país de Asia que permanecía combatiendo. El 15 de agosto de 1945, Tokio firmó la rendición incondicional.

La Iglesia japonesa celebra estos e aniversarios con un evento llamado "Diez Días por la Paz". El presidente de la Conferencia Episcopal, el Arzobispo de Tokio Monseñor Pietro Takeo Okada, ha enviado a finales de junio, el mensaje anual de los Obispos sobre el tema: "Llegamos a ser constructores de paz para el futuro, reflexionando sobre nuestro pasado". En el texto, el obispo escribe: "Cuando San Juan Pablo II visitó Japón en 1981, nos recordó que la guerra es siempre la destrucción de la vida, siempre la muerte Estas palabras resuenan en nuestros corazones desde hace 33 años que fueron pronunciadas".

Este año, añadió mons. Takeo Okada, "es también el 100º aniversario del estallido de la Primera Guerra Mundial. Reflexionemos sobre cómo nacieron estas guerras, recordando que un conflicto en nombre de la justicia nunca existe. Cómo japoneses y como católicos, tenemos que ser plenamente conscientes de la responsabilidad de las trágicas consecuencias de la guerra, reflexionando sobre el por qué esto nació".