Arzobispo de Singapur: para la fiesta nacional, renovar el espíritu de unidad y solidaridad
Hoy la ciudad estado celebra los 49 años de independencia de Malasia. En una carta pastoral, mons. Goh elogia los progresos y las conquistas, pero invita a renovar el "espíritu del voluntariado" en favor de los pobres y marginados. Pedido para la salvaguardia de la familia, primer modelo educativo para los niños.

Singapur (AsiaNews)- Singapur es una "nación joven" que es motivo de "orgullo" por cuánto ha sabido conquistar "en un período de tiempo relativamente breve"; de "avanzada colonial" supo transformarse "en uno de los Países más ricos en el mundo", pero la riqueza material no basta si no se es también "rico en virtud". Es cuánto subraya en una larga carta pastoral el arzobispo de Singapur, mons. William Goh Seng Chye, en ocasión del 49° aniversario de la Fiesta nacional por la Independencia, que se celebra hoy 9 de agosto para recordar la separación de Malasia en 1964. El prelado de hecho cita un reciente documento según el cual se hace notar que "somos una de las naciones más infelices".

Más pequeña que Nueva York y sin recursos naturales, la ciudad Estado está entre las primeras economías del continente asiático aunque si la riqueza no está distribuida en modo igualitario y el boom económico acentuó la disparidad entre los ciudadanos. Por esto mons. Goh aprovecha de la jornada de fiesta, para invitar a los fieles "a compartir nuestra abundancia con los menos afortunados"; el auspicia además "que se inculque en nuestros jóvenes el espíritu del voluntariado", en favor de los pobres y marginados de la sociedad.

En la carta pastoral el arzobispo de Singapur explica que "rechazar la solidaridad hacia los que se encuentran en los márgenes de la sociedad, significa rechazar a Cristo mismo" y que "tenemos que alegrarnos de nuestra riqueza conquistada", pero al mismo tiempo permanecer "humildes"

El prelado, renovando la invitación a una nación "fuerte y unida", exhorta a concentrar la atención en la próxima generación, formando ciudadanos que tengan "integridad, valores positivos y que se ocupen los unos de los otros". De aquí la invitación en proteger a la "familia", que atraviesa una crisis profunda de identidad, manteniendo y confirmando "el principio de unidad y de indisolubilidad del matrimonio y de la vida familiar". Porque es justo en familia, advierte, que los niños encuentran la primera escuela y los primeros modelos a los cuales mirar.

Celebrando el cumpleaños de la nación, concluye mons. Goh, rezamos por "una justicia temperada por la compasión" y por "la paz", unidad, comprensión recíproca y tolerancia". E invita a la actual clase dirigente a sacar inspiración de la esperanza, el coraje y de la resistencia "de nuestros padres fundadores".

En Singapur los católicos son más de 200 mil, un 5% más o menos del total de la población; entre las religiones, la más difundida es el budismo con el 43%;  seguidos por los cristianos con el 18% del total, el islam con el 15%, hinduismo y taoísmo con el 11 y el 5%. La Iglesia local vive una fase de crecimiento y dinamismo, que ha llevado a una reciente apertura de un seminario teológico, definido una verdadera "piedra miliar" para la comunidad local.