Puerto Princesa (AsiaNews/Cbcp)- Palwan es considerada una de las islas más bellas de Filipinas: un paraíso con la naturaleza incontaminada, una "gema verde"- como la llaman algunos- desconocida aún por el turismo de masa. Sin embargo esta tiene la tasa más alta de desnutrición del país y una población tribal que sufre hambre y que no tiene el más mínimo conocimiento en materia de salud.
Según el Municipal Health Office sobre 6.550 niños debajo de los 6 años, 1,118 (17,07%) están bajo peso; 256 (3,90%) en grave estado de bajo peso; apenas 60 (0,92%) están sobre peso.
Los distritos de Malawig y Taara- cuya población es sólo tribal- tienen el nivel de desnutrición más alto, respectivamente del 33,855 y del 32,86%. "Si bien en la zona hayan disponibles campañas de vacunación y de vacunas contra las lombrices intestinales- explica el doctor Allan Gintapan, funcionario del Municipal Hesalth Office- otros servicios como la asistencia prenatal e infantil no existen".
Además, según el médico, el Local Government Unit (Lgu) "debería dar la prioridad a la creación de servicios higiénicos y sanitarios a las familias más a riesgo y crear sistemas de agua potable y limpia". En lo que se refiere a la población, agrega el doctor Gintapan, "es necesario enseñar a estas personas la importancia de la dieta a base de proteínas y la necesidad de ser independientes desde el punto de vista económico. Quizás enseñándoles a hacer pequeños cultivos, que les de un modo de mantener en una manera adecuada a la familia".
De esto tiene untención de ocuparse también el Secretario nacional de Justicia y Paz de la Conferencia episcopal (Cbcp-Nassa), a través del proyecto "Reach Philippines". Con el apoyo de la Caritas Internationalis, la iniciativa tiende a desarrollar mejores oportunidades de sustentamiento y dar seguridad alimentaria y estructuras higiénico-sanitarias. La esperanza es la de lograr ayudar a 17.575 familias, con un total de 70.300 personas.