Papa: cerca de los católicos de "Irak y Siria, que viven momentos de gran sufrimiento y de miedo frente a las violencias"
Recibiendo a Youssif III Younan, patriarca de Antioquía de los Sirios, Francisco habla de la diáspora provocada por los conflictos de la región. "Este movimiento de fieles hacia países considerados más seguros empobrece la presencia cristiana en Medio Oriente". "Testimoniar el Evangelio en la confrontación, a veces no fácil, con personas de etnias y religiones diversas".

Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- "Solidaridad, compasión", recuerdo en la oración y el aliento a los siro-católicos "de Irak y de Siria, que viven momentos de gran sufrimiento y miedo frente a las violencias" fue expresada hoy por el Papa Francisco en el encuentro que tuvo esta mañana con Ignace Youssif III Younan, patriarca de Antioquía de los Sirios, acompañado por los obispos y fieles de la comunidad siro-antioquena, en ocasión del Sínodo anual de su Iglesia, que se desarrolló en Roma del 8 al 10 de diciembre.

"La difícil situación en Medio Oriente- dijo a ellos el Papa- ha provocado y continúa provocando en vuestra Iglesia desplazamiento hacia las Eparquías de la diáspora, y esto los pone frente a nuevas exigencias pastorales. Es un desafío: de una parte, permanecer fieles a los orígenes; por la otra, injertarse en contextos culturales diversas obrando al servicio de la "salus animarum" y del bien común. Este movimiento de fieles hacia países considerados más seguros, empobrece la presencia cristiana en Medio Oriente, tierra de profetas, de los primeros predicadores del Evangelio, de los mártires y de tantos santos, cuna de ermitaños y del monacato. Todo esto los obliga a reflexionar sobre la situación de vuestras Eparquías que necesitan de Pastores llenos de celo, como también de fieles llenos de coraje, capaces de testimoniar el Evangelio en la confrontación, a veces no fácil, con personas de etnias y religiones diversas".

"Muchos huyeron para ponerse a salvo de una inhumanidad que echa a poblaciones enteras, dejándolos sin medios de subsistencia. Con las otras Iglesias traten de coordinar vuestros esfuerzos para responder a las necesidades humanitarias sea de cuántos se quedan en la patria, como la de aquellos que se refugiaron en otros países. Ahora, volviendo a vuestras sedes, fueron reafirmados por esta experiencia de comunión vivida junto a las tumbas de los Apóstoles Pedro y pablo, una comunión  que encuentra particular expresión aquí, en el elevar al Señor juntos al Sucesor de Pedro una plegaria de gratitud y de súplica".

Os exhorto- concluyó- a continuar en vuestro compromiso pastoral y en el ministerio de esperanza al servicio de la venerable Iglesia Siro-católica. Saludo con afecto a los fieles que los acompañan, en los cuales veo a las diversas comunidades por ellos representadas. Los invito a llevar a todos la expresión de mi cercanía y de mi oración al Señor".