Dharamsala (AsiaNews) - La policía china ha golpeado hasta hacerlos sangrar a tibetanos del condado de Zamthang - prefectura de Ngaba - que se negaron a vender sus tierras al Estado. Los cuatro - Tarey Kyi, Samlha, Ratna Dhargay y Lukyi - sufrieron heridas graves como consecuencia de la paliza. Samlha está en estado crítico.
Según Radio Free Asia, las autoridades chinas han ordenado a los residentes - en su mayoría agricultores pobres - a vender la tierra para los programas de desarrollo de los prestamistas estatales o privadas. Las autoridades han amenazado a la población con "consecuencias graves", incluyendo la confiscación de tierras, en caso de negativa.
El año pasado, cientos de residentes han estado llevando a cabo una sentada de más de un mes contra el robo de la tierra en la prefectura de Ngaba. Pero el problema viene en 1986, cuando el gobierno chino prometió a los residentes puestos de trabajo de las prefecturas a cambio de la transferencia de la tierra: allí se han construido mataderos construidos y frigoríficos.
Desde entonces, las protestas contra las requisas forzosas han provocado una serie de manifestaciones de masas y, en 2013, la auto-inmolación de tres residentes que se manifestaban contra los abusos de Beijing.