Shanghai (AsiaNews)- Los parientes de las víctimas de la tragedia del Bund sucedida en Shanghai la noche de Fin de Año, piden al gobierno que les entreguen los cuerpos de sus familiares y polemizan sobre las indemnizaciones previstas. Muchos de los 36 cuerpos recuperados por las autoridades después del drama están aún en las morgues estatales, mientras que los de los 2 extranjeros-un malayo y un taiwanés. Ya fueron repatriados.
Pocos minutos antes de la medianoche del 31 de diciembre, miles de personas se reunieron en una terraza a lo largo de la histórica orilla del río Huangpu, cerca de la plaza Chen Yi, para admirar los fuegos artificiales en la opuesta orilla. En un cierto memento en una escalera se produjo el caos por la caída de algunos. La gente empezó a ir de un lado para otro cuando se difundió el pánico, que produjo la muerte de 36 personas y al menos de 47 heridos.
En un primer momento las redes sociales habían sugerido que el accidente fue causado porque alguien desde una ventana cercana lanzaba gran cantidad de dólares (falsos) sobre la gente, y que éstas para agarrarlos habrían desencadenado el agolparse de gente. Sin embargo la policía de Shanghai rechazó esta versión, sosteniendo que sólo pocos se movieron para agarrar los billetes de dinero.
Ahora las familias de las víctimas piden al gobierno que les permita dar sepultura a sus propios queridos, pero hasta ahora los funcionarios les niegan el permiso. Un joven de Chengdu, que perdió un primo, cuenta que las autoridades "están en estado de alerta". "Nosotros los familiares fuimos llevados a lugares diversos y algunas personas nos siguen adonde vayamos".