Minas chinas, amenaza al ecosistema y a la vida de los tibetanos
Nuevas protestas en la provincia de Qinghai contra las operaciones mineras. La población local denuncia la deforestación de las montañas y la contaminación de los cursos de agua. La connivencia entre los propietarios de los establecimientos y la administración local y central.

Dharmsala (AsiaNews/Rfa)- Es alarma contaminación en la región tibetana de la provincia de Qinghai, en China. Lo denuncia son fuentes de Radio Free Asia (Rfa), que explican como las operaciones mineras de Beijing están destruyendo el ambiente, con la deforestación de las montañas y la contaminación de los cursos de agua para el fluido de los establecimientos.

En particular, la población tibetana está protestando de hace días por las minas de la prefectura autónoma tibetana de Tsojang (Hibei en chino). Sin embargo, los ligámenes entre los propietarios de las minas y autoridades locales están haciendo vanas las manifestaciones de la gente.

"Los propietarios- explica la fuente de Rfa, anónima por motivos de seguridad- están ganando una enorme cantidad de dinero de las minas. Y para continuar su trabajo, pagan a las autoridades ya sea a nivel provincial de centrales. De este modo, cuando exponemos nuestras laméntelas, no recibimos ninguna ayuda".

El año pasado, un hombre anciano llamado Ugyen Kyab, originario del pueblo Gongma (condado de Kangtsa), hizo un pedido a las autoridades centrales chinos para que se declarasen contra los establecimientos. Sin embrago, la administración local lo arrestó.

Los funcionarios chinos han negado a los tibetanos de la zona el pago de 100 mil yuan (16.090 dólares), prometido originariamente para obtener el uso del terreno.

Análisis conducidas hace algunos años en la zona de Tsojeng han relevado un terreno: "rico de depósitos de hierro, cobre y calcáreos", subraya la fuente. "Lamentablemente ya las obras u operaciones mineras están en plena actividad- agrega- si tener en cuenta ninguna consideración por el ambiente que lo rodea".

El terreno disponible para los tibetanos para pastorear sus greyes está reducido en modo notable. Además de la espoliación de las montañas y a la contaminación de los ríos (causa de enfermedades para hombres y animales), tales actividades mineras han llenado los valles de polvo. Además, el uso de explosivos impidió la proliferación de los Cordyceps, un hongo parásito usado y vendido a precio alto por sus propiedades medicinales.