Katmandú (AsiaNews)- Miles de personas de toda religión, edad y extracción social han manifestado ayer en la capital, por el estupro y la muerte de una niña de 6 años. Puja Sah, del distrito de Bara (Nepal meridional), fue violentada por un joven de 28 años Kanti Gupta, el 20 de febrero pasado. Encontrada sin sentido e internada en el hospital de Kanti, la pequeña murió el 10 de marzo a causa de los traumas sufridos. Toda la sociedad nepalesa condeno firmemente el crimen y pide al gobierno una ley que prevea para los violadores la cadena perpetua y la confiscación de todos sus bienes.
El p. Bill Robins sj, ex provincial de los jesuitas de Nepal, estaba presente en la marcha: "Es difícil de creer que pueda suceder un estupro de una niña de 6 años. Las violencias sexuales y otros crímenes están aumentando por el crecimiento de la desertificación espiritual de la población. El gobierno y la sociedad deben dar mayor resalte e importancia a la esfera espiritual".
Diversos grupos por los derechos humanos han anunciado varios sit.in de protesta, hasta cuando el culpable no sea condenado. Algunos han pedido al Primer ministro, Sushil Koirala que ajusticien al autor agresor con la horca. El Premier replicó diciendo que "Nepal no prevé la pena de muerte para los estupradores, pero prometo que le será dada la mayor de las penas".
Según el Código penal nepalés, un estuprador arriesga de entre 10 y 15 años de cárcel si la víctima tiene menos de 10 años; 10 años de prisión si la víctima está entre los 11 y los 14 años de edad; de 6 a 10 años si la víctima tiene entre 14 y 16 años; entre los 5 y los 8 años de edad si tiene menos de 20 años; entre los 5 y 7 años de prisión si tiene más de 20 años.
Badri Narayan Sah, padre de la niña muerta, declaró: "Mi hija se convirtió en un víctima, pero el gobierno debe actuar y crear nuevas leyes para proteger a las otras hijas de este país. No celebraremos el funeral hasta cuando las autoridades no me asegurarán que los violadores arriesgarán la cadena perpetua y la confiscación de sus propiedades".
Según los datos oficiales de la policía, cada semana suceden al menos 2 o 3 casos de estupro en Nepal, Sin embargo, a menudo las violencias no son denunciadas y por lo tanto el número podría ser mayor.