Mumbai (AsiaNews)-“Estamos satisfechos por el veredicto. Ninguno puede recurrir a acciones bárbaras y violentas por una presunta ofensa al islam. Este gesto cruel y escalofriante fue uno de los más depravados que haya jamás visto” Es lo que afirma a AsiaNews Sajan George, presidente del Global Council of Indian Crhidtians (Gcic), comentando una serie de condenas por la agresión al profesor T,J. Joseph, cristiano al cual un grupo de desconocidos le cortó una mano y parte del varazo en el año 2010, por una acusación de blasfemia.
El 8 de mayo pasado, un tribunal especial de Ernakulam reconoció culpables de ataque a 13 personas, Diez de los imputados fueron condenados a 8 años de cárcel, otros 3 a 2 años de ´prisión. Además de las detenciones, los responsables deberán pagar una indemnización de 800 mil rupías (11.200 euros).
El saco fue presentado por la National Investigation Agency (Nia), la policía federal de India. El procurador había acusado a los imputados de homicidio, conspiración y sedición y había pedido la cadena perpetua para todos. La corte reconoció la culpabilidad, pero redujo la pena en modo sensible. Por esta razón el procurador se dijo “no satisfecho” por el veredicto y declaró que apelará a un tribunal más alto.
En el pasado la corte había absuelto a 18 imputados por “falta de pruebas”. Otros 5 investigados, entre los cuales el principal imputado. Están aún prófugos.
Profesor de literatura malayalam en el Newman College de Thodupuzha, T. J. Joseph fue atacado por activistas del Popular Front of India en julio del 2010, mientras volvía a su casa después de misa junto a su madre y a su hermana. Los agresores le dijeron que lo iban a castigar por las “sutilezas sacrílegas” de una pregunta de un cuestionario que había hecho hacer a sus alumnos; luego le cortaron una mano y parte del brazo derecho.
Desde el momento de la agresión, el docente está libre bajo caución: en abril de 2010 fue arrestado por causa del cuestionario, que algunos grupos musulmanes habrían considerado ofensivo para el profeta Mahoma.
Los agresores de Joseph- afirma a AsiaNews- el presidente del Gcic-han aplicado el “modelo talibán” cortándole la mano: han querido también atacar a la conciencia y al desarrollo, representados por su trabajo como docente”.