Raqqa, kurdos conquistan una base militar al estado islámico
La avanzada kurda apoyada por ataques aéreos Usa y por la ayuda en el terreno de otros grupos rebeldes. Los kurdos avanzan hacia la capital del “Califato”. Expertos: “El estado islámico está colapsando al interior de sus propios bastiones”.

Damasco (AsiaNews/Agencias)- Las fuerzas de seguridad kurdas en el norte de Siria, han conquistado una base militar de importancia estratégica, hasta ahora en manos del Estado islámico (EI), en el norte de la ciudad de Raqqa, auto-proclamada capital del “Califato” por los mismos milicianos. En su avanzada las milicias de la Unidad para la protección del pueblo (Ypg, los combatientes kurdos en Siria) han aprovechado de los ataques realizados por los EEUU y por el apoyo en terreno por otros grupos antagonistas de los jihadistas.

El nuevo suceso militar del frente kurdo llegó a una semana de la conquista de una zona de frontera con Turquía, por mucho tiempo en manos del Estado islámico. Se trata de la zona de frontera que une la ciudad siria de Tel Abyad, ahora bajo el control del Ypg, con Akcakale, el primer pueblo turco más allá de la frontera.

En el contexto de la operación, las milicias kurdas han sacado a la luz un túnel de 500 metros que, una vez terminado, habría unido Tel Abyad con el primer pueblo al interior de la frontera turca, Akcakale. Excavado por los jihadistas, el túnel fue descubierto durante las operaciones de bonificación que han desmantelado una de las principales vías de comunicación utilizadas por los fundamentalistas para hacer pasar stocks y provisiones.

A causa de los graves combates, miles de personas se dirigieron más allá de la frontera en territorio turco.

El vocero de las fuerzas de seguridad kurdas refiere que el Ypg ya tiene el completo control de la base de Liwa, bien dentro el territorio controlado por el Estado islámico. Redur Xelil agrega que los combatientes kurdos están ahora en las puertas de Ain Issa, una pequeña ciudad a sólo 50 km de Raqqa. El complejo militar, desde el año pasado en manos del EI, aparece cerca de los caminos de enlace estratégico que unen a Raqqa con otros puestos de avanzada jihadistas de la provincia de Alepo hacia el oeste y Hasakah por el este.

Para Rami Abdel Rahman, director del Observatorio sirio para los derechos humanos, grupo con base en Londres y una notable red de informadores en el terreno, estas derrotas muestran que el “Estado islámico está colapsando en el interior de sus propios bastiones”.

El frente septentrional sirio es una de las pocas fuentes de buenas noticias ene l contexto de la campaña militar internacional contra las milicias de Estado islámico, considerando la avanzada de los jihadistas en muchas otras zonas de Siria y del vecino Irak.

Desde el inicio de la revuelta contra el presidente Bashar al- Assad, en el año 2011, más de 3,2 millones de personas han abandonado Siria y otros 7,6 millones son evacuados internos. Al menos 230 mil son las víctimas del conflicto, muchas de las cuales civiles para los cuales el 2024 fue el año peor.