Dacca (AsiaNews) - Cientos de personas se reunieron ayer en Dacca para exigir la detención y el castigo ejemplar para Al-Amin, un joven musulmán que violó a una niña cristiana de 12 años. La víctima fue atacada el 4 de agosto pasado, mientras estaba sola en casa, cuando ambos padres estaban ausentes en el trabajo. Ahora la niña está hospitalizada. A pesar de que se conoce la identidad del violador y los padres han presentado una denuncia, la policía aún no ha arrestado.
La víctima es un grupo étnico tribal garo que en Bangladesh profesa la fe cristiana. Su familia es originaria de la diócesis de Mymensingh, pero se mudó a la capital para trabajar.
Los manifestantes se reunieron frente al National Press Club en Dhaka, a iniciativa del Bangladesh Garo Chatro Sanghton Dhaka Metro Politan Branch - una organización estudiantil de la comunidad garo - y otros grupos de derechos humanos. "Siendo una minoría - dijo Pappu Piter Dio, cristiano y presidente de la asociación - estamos abandonados por el gobierno y la administración, por lo que a menudo somos víctimas de abusos. Si fueran enjuiciados y castigados los criminales, el número de ataques contra las minorías disminuiría".
En mayo pasado otra chica de etnia garo, una estudiante católica de 21 años, sufrió una violación en grupo.