Java Central: Fiesta de la convivencia entre cristianos, musulmanes y budistas en Kudus
de Mathias Hariyadi
La arquidiócesis de Semarang organizó un evento que reunió a líderes de todas las confesiones para fortalecer los lazos de amistad. Cada comunidad preparó danzas y cantos. La región, que es mayormente musulmana, ha sido siempre un ejemplo de tolerancia.

Kudus (AsiaNews) – Representantes de todas las religiones se reunieron en Kudus el 23 de agosto pasado para un momento de fiesta organizado por el Balai Budaya Rejosari (BBR), movimiento de la Arquidiócesis de Semarang, en Java Central. El objetivo de las celebraciones, explica el Padre YB Haryono, director del BBR, era “olvidar” la sequía que castigó al país en los últimos meses, festejar los 70 años de la independencia del país y fortalecer las relaciones interreligiosas de la comunidad, favoreciendo la expresión del “genio local”.

El evento se extendió desde las 10 de la mañana hasta el alba del día siguiente, e incluyó un gran número de actividades culturales de la juventud católica y protestante, danza Manipuren de los hindúes y desfiles de las comunidades budista e hindú. El  Padre Lukas Heri Purnawan, sacerdote católico, hizo una puesta en escena de un espectáculo de marionetas chinas.

La presencia musulmana también fue consistente. Se desarrollaron conferencias sobre temas religiosos con la participación de líderes locales como Kiai Hajj Happy de Pati, Gus Ubaidilah Ahmad de Rembang y Mas Gunretno de Sedulur Sikep.

El BBR eligió, como símbolo del encuentro, una caña de bambú. El Padre Haryono explicó que “el bambú es el símbolo de la unidad nacional, en tanto sus fibras representan a las diversas personas de la sociedad, que son aceptadas en un único cuerpo”.

Kudus, ciudad sobre la costa oriental de Java, es de tradición islámica y es el único lugar que ha mantenido la denominación recibida durante la dominación musulmana del siglo XVI  (al-Quds). El área oriental de Java, conocida como “Pantura Timur”, es sede de las organizaciones musulmanas más grandes del país, como la Nahdlatul Ulama (NU). La zona ha sido siempre un ejemplo de convivencia pacífica entre diferentes religiones, y jamás se registraron episodios de sectarismo violentos. Los miembros de cualquier confesión son llamados con el término sincrético “Samin”.

El BBR, fundado hace dos años por iniciativa de Mons. Pujasumarta, arzobispo de Semarang, organiza cada año eventos con el objetivo de fortalecer la convivencia. Se ha convertido en un centro “religioso y cultural” para toda la población. El P. Haryono, director del BBR, dice a AsiaNews: “No importa a qué religión pertenecen las personas que vienen, para nosotros son siempre bienvenidas y pueden usar nuestras instalaciones para el objetivo que sea: actividades culturales, encuentros interreligiosos u otros”.

El 13 de agosto, el mismo movimiento– con la colaboración del Padre Aloys Budi Purnomo, a cargo de la Comisión Interreligiosa de la Arquidiócesis de Semarang – reunió a los líderes religiosos y a autoridades político-militares para redactar una declaración contra la violencia religiosa. El evento fue organizado en respuesta a los incidentes ocurridos en Tolikara a fines de julio, en los cuales dos iglesias protestantes fueron destruidas