Beijing (AsiaNews) - Una joven mujer en Beijing estranguló a su hijo recién nacido, lo metió en una bolsa de plástico y lo tiró a la basura. Detenida tras ser denunciada por un vecino que escuchó el llanto de un bebé pero no pudo salvarlo, se declaró culpable en una audiencia frente al tribunal de la Corte de Segunda Instancia de un pueblo de la capital.
La acusada (ver. Foto) dijo a los jueces que estaba arrepentido del acto cometido, y añadió que actuó porque "estaba agotada de cuidar a su primer hijo, de un año, y porque cuesta demasiado mantener a otro".
La audiencia fue seguida por el sitio Qq.com. La mujer, Wan Hongyu, tiene 25 años y vive en el distrito de Daxing en la capital china. Wan dijo que había mantenido en secreto el segundo embarazo de su marido, sin contárselo ni a el ni a la familia del hombre, con quien convivía la pareja al momento del asesinato (julio de 2015). Luego de dar a luz en secreto, cometió el terrible acto y trató de deshacerse del cuerpo.
El marido, que no participó en el proceso, dijo que la mujer "mintió cuando le pregunté si estaba embarazada. En cualquier caso, quiero decir que la he perdonado por lo que hizo. Tenemos otro hijo y no quiero que pierda a su madre. Ella es una buena mujer". La reunión ha sido actualizada por los jueces, que emitirán la sentencia a finales de octubre de 2015. Es poco probable que la presente un recurso de apelación.