Sorpresiva visita de Ban Ki-moon para frenar las violencias entre Israel y Palestina
El secretario general de las Naciones Unidas hace un pedido a la calma. Ni las armas, ni los muros llevarán “la paz y la seguridad”. Mientras tanto continúan los acuchillamientos y las muertes. Demolida la casa de un palestino que hace un año, atacó a propósito a una pequeña ciudad israelí. La Shin Bet arresta a un líder de Hamas.

Jerusalén (AsiaNews/Agencias)- Con una decisión sorpresiva, el secretario general de las naciones unidas, Ban Ki-moon llegó esta mañana a Israel en el tentativo de disminuir la tensión entre ambos frentes e interrumpir la espiral de violencia que ha incendiado la región. Él debería encontrar al Premier israelí Benjamín Netanyahu y al presidente Reuven Rivlin; para mañana está previsto, ujn encuentro cara a cara con el presidente de la Autoridad palestina, Abu Mazen, a poco más de dos semanas del inicio de la nueva intifada de “los cuchillos”, que ya provocó más de 50 víctimas.

Precedentemente, el jefe de la diplomacia Onu había dirigido un pedido a los dos frentes en lucha, expresando la propia consternación en el ver a jóvenes, niños “recoger las armas y tratar de matar”. Él agregó que la violencia es un obstáculo “a las legítimas aspiraciones de los palestinos” y dice que entiende la cólera de los israelíes que se sienten potenciales víctimas. Sin embargo, los muros, los puestos de bloqueo o de control, la demolición de las casas- concluye- no pueden sostener la “paz y la seguridad”.

Mientras tanto continúan los episodios de violencia, los últimos de los cuales se verificaron esta mañana en Hebrón, en Cisjordania. Un ciudadano israelí a bordo de un automóvil fue objeto de u lanzamiento de piedras y cascotes. Saliendo de su coche fue atropellado por otro vehículo y murió. En precedencia las fuerzas de seguridad han asesinado a un palestino que había acuchillado a un soldado israelí.

El número de las víctimas sobre el lado israelí aumentó a ocho, mientras que son más de 40 los muertos entre los palestinos, algunos de los cuales protagonistas de ataques con armas blancas contra objetivos militares y civiles israelíes. Para tratar de frenar los ataques las autoridades han autorizado la construcción de un muro (por ahora interrumpida) en Jerusalén este, para dividir el barrio palestino de Jabal Mukaber del vecino barrio hebreo de Armon HaNatziv.

Durante la noche en Hebrón se verificaron ulteriores enfrentamientos después que el ejército demolió la casa de Maher al-Hashalmoun, un  palestino que hace casi un año mató a una ciudadana israelí chocándola con su propio automóvil y apuñalándola varias veces. La demolición de la habitación fue aprobada por la Corte suprema de Israel en los meses pasados, que rechazó el recurso de los familiares.

Durante la mañana, en cambio, se realizó el arresto en Cisjordania de Hassan Yussef, uno de los más importantes exponentes de Hamas, dirigente político y puento de referencia espiritual para los que apoyan a la organización islamista. Protagonistas de la operación los hombres de los servicios secretos del Shein Bet, que detuvieron al hombre durante una redada en su casa en Beitunia, a sudeste de Ramallah.

Los palestinos acusan a Israel de querer modificar el “Status quo”, dando el vía libre al acceso y a la oración en la Explanada de las Mezquitas también a los hebreos. Rechazando con fuerza las insinuaciones, el Premier Netanyahu excluyó la hipótesis de una “presencia internacional” en el lugar santo como ha pedido  Francia, durante una reunión del Consejo de seguridad de la Onu.