Yakarta (AsiaNews)- El gobierno reformista del presidente Joko “Jokowi” Widodo entiende enfrentar una de las cuestiones más controvertidas en tema de libertad religiosa en Indonesia, el país musulmán más poblado del mundo: la modalidad de construcción de lugares de culto. Un tema delicado, fuente de controversias entre credos y de batallas de las minorías, en particular la cristiana, que denunció ya varias veces en el pasado límites y restricciones, sino también casos de abusos. A un año de la asunción al poder, el ejecutivo parece por lo tanto orientado a seguir el camino del diálogo y de la armonía entre credos y menos vínculos para los edificios religiosos.
En el centro de la discusión está el famoso IMB (Izin Mendirikan Bangunan), el permiso de construcción que desde 2006 regula el nacimiento (o la restructuración) de los edificios en el archipiélago, con una particular atención a los lugares de culto. Según el decreto conjunto. Ministerio de Asuntos religiosos y del Interior- hoy en vigor, para ser aprobado cada proyecto de iglesia debe tener la firma de al menos 99 fieles y debe ser apoyado por al menos 60 residentes en el área, aprobados por el jefe del pueblo.
En el tiempo el permiso para edificar, restaurar, reconstruir una capilla, una iglesia, una casa de oración se convirtió en una cuestión crucial contra la cual los fanáticos se lanzan y protestan, bloqueando de hecho los proyectos ya iniciados o en fase de estudio.
El caso más emblemático es el de la GKI Yasmin Church de Bogor (West Lava). Hasta hoy los cristianos protestantes no tienen acceso y no pueden utilizar el lugar de su propiedad. Como protesta, de hace tiempo desarrollan sus funciones al aire libre y en más de una ocasión han celebrado por protesta delante del palacio presidencial ya sea del actual como de la precedente administración. En el pasado, el ex jefe de Estado, Susilo Bambang Yudhoyono prometió resolver la cuestión, pero no quiso intervenir por temor de enemistarse el ala fundamentalista islámica interna.
Entonces, recientemente, la cuestión relativa a la ley sobre los lugares de culto volvió a ser de actualidad y ahora está en la mesa de los responsables de los ministerios interesados, además que en las de los funcionarios de seguridad y de la magistratura indonesia. El ministro del Interior, Tjahjo Kumolo confirma que en los últimos casos controvertidos de Aceh y Papuasia han obligado al ejecutivo a enfrentar la cuestión. “Es mi opinión personal- agregó- que la parte que se refiere a la junta de firmas va reducida en número, sino mejor eliminarla”.
Fuentes oficiales refieren que los éxitos de los encuentros entre ministros del Interior y de Asuntos religiosos serán presentados en un segundo momento a los vértices de Asuntos legales y de la seguridad. La propuesta de reformas agrada a grupos y organizaciones religiosas indonesias también musulmanas. La líder femenina Alif, del Fahmina Institute, afirma que “cada forma discriminatoria” en relación con las minorías religiosas “debe ser revisada”, junto a las cuestiones irresueltas de hace tiempo, ante todo la cuestión de la Yasmin Church.