Lahore (AsiaNews) – El incendio de la iglesia no ocurrió a continuación de un litigio entre cristianos y musulmanes, y quien lo dice “conspira creando tensión en el área”. Es lo que afirma Yaqoob Saroya, pastor de la iglesia apostólica de Baath (40 km al norte de Lahore), que el pasado 6 de enero fue parcialmente destruida por un incendio. Los ancianos de la aldea, tanto cristianos como musulmanes, hacen eco de sus palabras, según las cuales los medios han hecho circular noticias falsas. Algunos medios, de hecho, han informado que antes del incidente los musulmanes habían solicitado a los cristianos que apagasen los altopralantes para no perturbar sus oraciones. El pastor de la iglesia se habría opuesto, y el incendio fue considerado una represalia de extremistas islámicos.
Yaqoob Saroya cuenta a AsiaNews: “Hemos encontrado algunas huellas de manos y pies en el muro de la iglesia, que sugieren que alguien lo escaló, pero nadie vino a vernos por los altoparlantes; no hubo ningún conflicto. Nuestros vecinos musulmanes nos ayudaron a apagar el incendio. Alguien publicó en Facebook el video de la iglesia en llamas, y la gente comenzó a difundir la noticia sin saber acerca de los hechos”.
Abdul Hameed, el nambardar musulmán local (terrateniente con poderes de gobierno), afirma que la comunidad islámica está buscando al culpable que habría irrumpido en la iglesia: “Estamos doloridos [por lo sucedido] y estamos unidos a los cristianos, porque todos los lugares de culto son iguales. El malvado no amerita el perdón. No podemos vivir sin el apoyo de los cristianos, que son la espina dorsal de la aldea”.
Saroya afirma que los cristianos son libres de observar el culto: “Cinco agentes de policía custodiaban la iglesia durante el servicio. Esta es una conspiración para difundir tensión en el área; nosostros vivimos como hermanos. Una ONG cristiana nos dijo que denunciemos a alguien ante la policía; otra nos dijo que no deberíamos haber pintado la iglesia tan rápido (ver video). Todo esto no hace ningún bien a las minorías del país”.
La policía declaró que el incendio fue causado por un cortocircuito. Las llamas destruyeron parte del edificio, sillas, alfombras, tiendas e instalaciones eléctricas.