Yemen, la coalición saudita y los rebeldes Houthi “intentan respetar” la tregua Onu

Entra en vigor hoy el cese del fuego entre las partes, mediado por las Naciones Unidas. Dentro del fin de mes en Kuwait iniciarán los coloquios de paz. Ayer veinte muertos en los enfrentamientos a fuego. En el conflicto muertos más de seis mil doscientas personas, los evacuados al menos dos millones. Riesgo de “catástrofe humanitaria” en el país.


Sanaa (AsiaNews/Agencias)- La coalición saudita que apoya a las fuerzas del gobierno de Yemen y los rebeldes Houthi, ambos están intencionados en “respetar” la tregua, mediada por las Naciones Unidas, que entra en vigor a partir de hoy. Fuentes oficiales de la coalición y un vocero de los rebeldes chiíes, cercanos a Irán, confirmaron la entrada en vigor del cese del fuego.

Según fuentes de la Organización mundial de la salud (OMS ) en la guerra murieron más de seis mil doscientas personas, dos millones al menos los evacuados en un año de combate; para las Naciones unidas existe un fuerte riesgo de “catástrofe humanitaria” en Yemen.

Para detener la guerra se mueve la diplomacia internacional, en el tentativo de encontrar un difícil acuerdo entre las partes. Dentro de fines de abril está previsto el inicio de los coloquios de paz, que se realizarán en Kuwait.

El enviado especial Onu en Yemen, Ismail Ould Ahmed recibió con favor la tregua definiéndola “crítica, urgente y necesaria”. “Yemen- agregó- no puede enfrentar la pérdida de más vidas humanas”. En el contexto del cese del fuego las partes se comprometen a consentir el paso de ayudas humanitarias y abastecimiento a las zonas que están más en riesgo.

Acogiendo el pedido del presidente Abdrabbuh Mansour Hadi, la coalición saudita afirma que “respetará el cese del fuego”, si bien “se reserva el derecho de responder” a eventuales ataques rebeldes.

 

Sólo ayer, a pocas horas de la entrada en vigor de la tregua, al menos murieron veinte personas en los enfrentamientos entre las partes.

Desde enero del año pasado la nación del Golfo es teatro de un sangriento conflicto interno que enfrentados a la dirigencia sunita, apoyada por Arabia Saudita y los rebeldes chiíes Houthi, cercanos a Irán. En el mes de marzo, los sauditas, encabezando una coalición, realizaron ataques aéreos contra los rebeldes en un intento por liberar la capital, Saná,y entregar el país al presidente (antes del exilio, luego volvió) Abdu Mansour Hadi.

Para Arabia Saudita, los Houthi, aliados con las fuerzas fieles al ex presidente Alí Abdullah Saleh, son apoyadas en el plano militar por Irán; una acusación que Teherán rechaza. En el país hay además varios grupos activos de extremistas ligados a al-Qaeda y milicias ligadas al Estado islámico, que contribuyeron en aumentar la espiral de violencia y terror.