Declaraciones de júbilo del premier Obaidi. El ejército afirma que aún hay algunas pequeñas bolsas de resistencia. Los jefes de Daesh huyeron, dejando sólo a algunos combatientes. Muchos de los habitantes ya habían abandonado la ciudad y ahora son refugiados.
Fallujah (AsiaNews) – Fallujah fue liberada de los terroristas del llamado “Califato islámico” de Daesh; es cuanto refirió ayer con júbilo el primer ministro iraquí Haidar Al Obaidi, anunciando que “las fuerzas del ejército han llegado al corazón de Fallujah” y congratulándose con “el pueblo iraquí por esta victoria”.
En un discurso dirigido a la nación, Obaidi prometió también nuevas y próximas victorias en Mosul, “el próximo destino”, invitando a “todas las instituciones del Estado a poner a disposición todos los recursos para garantizar a los civiles” de Fallujah “la asistencia humanitaria que necesitan”.
Dirigiéndose a los combatientes de Daesh, dijo: “No hay lugar para vosotros en Irak. Prometimos liberar a Fallujah y las fuerzas de seguridad mantuvieron su promesa, contrariamente a los jefes de Daesh, que habían prometido resistir y que luego abandonaron a sus fieles para darse a la fuga”.
El teniente general Abdel Wahab Al Saadi, Comandante de las operaciones militares en Fallujah, anunció “controlar totalmente el vecindarios de Nazal [en el centro de la ciudad] ya liberado de Daesh” reconociendo, no obstante, que una ‘pequeña bolsa’ de Daesh continúa registrándose en algunas partes de la ciudad, y que ésta será aplastada en las próximas horas. Fallujah, a sólo 50 km de Bagdad, estaba en manos de ISIS desde 2004, y fue uno de los bastiones del Califato.
La Policía federal confirmó que “la bandera iraquí ya flamea sobre el Palacio administrativo, así como sobre el hospital de la ciudad” de Fallujah.
La noticia generó un amplio consenso entre los diferentes componentes del país, dando esperanza a todos. Una parte de la prensa incluso habla de “una nueva página gloriosa que ha de agregarse al libro de la historia contemporánea de Irak”
Lo que todos confirman es que la resistencia de Daesh fue menor de cuanto se preveía, desenmascarando el aura de terror invencible que la propaganda del EI supo difundir por meses.
La huida del campo de batalla efectuada por sus jefes, dejando a la vanguardia a los combatientes “convencidos” contribuirá a sembrar una total desconfianza en los eventuales simpatizantes del Califato, que se halla en pleno fracaso militar y moral.
Decenas de cuerpos de combatientes del ISIS yacen por las calles de la ciudad, destruida por los bombardeos. Al inicio de las operaciones de reconquista, muchos habitantes trataron de huir, buscando ser acogidos en campos de refugiados. Cuando comenzó la operación, en la ciudad había al menos 50.000 residentes. Luego de ser usados como escudos humanos y de haber huido del lugar, no se sabe con certeza cuál es el número actual de residentes. (PB)