Sacerdote nepalés: Basta de escudarse en la fe para cometer crímenes
de Christopher Sharma

Un gurú hindú fue arrestado por estafar a jóvenes y luego venderlos a traficantes de personas. Dos fieles budistas fueron hallados con 35 kilos de marihuana escondidos dentro de libros sagrados. El P. Ignatius Rai, párroco de Katmandú, advierte sobre el “uso impropio de la religión para fines que socavan la dignidad”


Katmandú (AsiaNews) – Es peligroso y preocupante “el uso impropio que se hace de la religión en Nepal. La pureza de la fe no debiera ser socavada por nadie”. El P. Ingnatius Rai, párroco de la catedral de la Asunción de Katmandú comenta de esta manera el arresto del gurú hindú y de unos budistas por tráfico de personas y narcotráfico.

Punya Prasad Dangal, docente y adivino hindú de 75 años de edad, fue detenido hace dos días con la acusación de haber engañado a un gran número de jóvenes que solían buscarlo para pedirle consejo sobre el futuro. El gurú los convencía de que viajaran al exterior (sobre todo rumbo a Japón, a los Estados Unidos y a Canadá), exigiéndoles honorarios para así incluirlos en los grupos de víctimas del terremoto. Los jóvenes luego terminaban en manos de traficantes de personas. El gurú se habría apropiado así de 2,5 millones de rupias (aproximadamente 20.000 euros).

Bijaya Manandhar, una de las víctimas, relata: “Todos lo respetábamos como gurú, y muchos iban a verlo para pedirle consejo. Él engañaba a las personas y las despachaba al exterior con visas de migrantes. Yo confiaba en él, y él me había aconsejado que viajara al exterior para tratar de ganar más dinero. Pagué una suma como anticipo, pero cuando me puso en contacto con una red de traficantes, lo denuncié”.

Sitamaya Tamang, una joven, afirma que Punya Prasad Dangal “tenía buenos contactos con países árabes, adonde enviaba a personas para que estas fueran vendidas a los milicianos islamistas. Muchos jóvenes inocentes son usados como escudos humanos, así como muchas jóvenes son utilizadas como esclavas sexuales”.

En otro caso difundido a través de la crónica, la policía arrestó a Saiman Tamang (25 años) y a Dhan Bahadur Tamang (37) por estar en posesión de 35 kilos de marihuana. Ambos provienen de una famosa zona budista cerca del monasterio de Kopan, en la capital. La droga estaba a punto de ser vendida en el mercado extranjero, y fue hallada dentro de algunos textos sagrados budistas. La policía también incautó un millón de rupias en efectivo.

Según los agentes, los dos hombres formarían parte de un cártel de la droga liderado por el budista  Dharma Pakhrin, con sede en Bangkok. Los traficantes son conocidos por vender sustancias estupefacientes en Holanda y Hong Kong, escondiéndolas en objetos religiosos. La policía está convencida de que, en este caso, el lote estaba destinado a algunos militantes islámicos.  

De acuerdo a las autoridades, Nepal se está convirtiendo en un centro de distribución de drogas cada vez más importante, sobre todo a causa del incremento de la presencia de ciudadanos chinos en el país. El tráfico que parte de Katmandú recibe los estupefacientes de todas partes del mundo, manteniendo contactos con Pakistán, Brasil, Tailandia, Filipinas, Arabia Saudita y los Estados Unidos (además de muchos otros países).