Cardenal Bo: Yangon permite a todas las religiones asesorar al Gobierno

El arzobispo se reunió con Aung San Suu Kyi en el "día de los mártires" de la nación, pidiendo que los cristianos y los musulmanes tengan relaciones directas con los ministros. Los líderes islámicos han acogido la sugerencia, pero los funcionarios del gobierno se niegan a comentar.


Yangon (AsiaNews / Agencias) – Que a todas las comunidades religiosas, y no sólo a los budistas, se les permita trabajar en contacto directo con el gobierno, para asesorar y ayudar en el proceso de la reunificación nacional de la armonía interconfesional. Lo ha pedido Mons. Charles Maung Bo, Arzobispo de Yangon, a Aung San Suu Kyi, consejera de Estado y ministro de Birmania.

Hasta ahora, el gobierno de Birmania - incluso bajo la junta militar - ha tenido relaciones sólo con la comunidad budista.

Los dos se reunieron el 19 de julio con motivo del "Día de los mártires", durante el cual recordaron la muerte de Bogyoke Aung San, padre de Suu Kyi y héroe de la independencia de Birmania, asesinado junto con ocho de sus compañeros en 1947. La Premio Nobel de la paz ha llamado a su propia casa en Yangon a algunos líderes religiosos para una ceremonia conjunta (v. foto).

U Aye Lwin, presidente del grupo de amistad interreligiosa del Consejo Islámico de Myanmar, presente en la reunión, dijo que "el cardenal sugirió que los representantes de las diferentes religiones del budismo puedan ser asesores del ministro". El líder musulmán reconoce la conveniencia de la propuesta: "Es una buena idea ya que hasta ahora el Ministro de las Religiones no ha garantizado la representación de otras religiones".

U Win Aung San, director del ministerio, declinó hacer comentarios sobre la sugerencia de Mons. Bo, limitándose a señalar que "de acuerdo con la Constitución de 2008 todos los ciudadanos tienen la libertad de culto. También pueden celebrar las fiestas religiosas. Por ejemplo, los cristianos pueden celebrar la Navidad y los musulmanes el Eid”.

El gobierno de la junta militar antes y ahora el liderado por la Liga Nacional para la Democracia han sufrido las presiones de grupos fundamentalistas budistas (como el Ma Ba Tha), que se han lanzado en contra de las minorías proponiendo la "concepción de la religión de Estado". En el 2015, Ma Ba Tha ha hecho aprobar las “Leyes en defensa de la raza y de la religión”, reglas que rigen la poligamia y las conversiones queridas para golpear a los musulmanes, acusados de hacer cada vez más adeptos.

El censo de las religiones publicado por el Gobierno el 22 de julio, sin embargo, muestra que los seguidores del Corán son sólo el 2,3% de la población (1,1 millones), mientras que el budismo sigue siendo de lejos la primera religión del país ( 89,8%), seguido por el cristianismo (6,3%).