Unos 700 trabajadores se enfrentaron con agentes vestidos de civil que han bloqueado las calles de la ciudad. Desde hace dos meses está en construcción la nueva estructura, que impedirá la pesca en las cercanías. El gobierno ha indemnizado a los pescadores con cifras irrisorias.
Hanói (AsiaNews/Rfa)- La policía vietnamita ha bloqueado con la fuerza una manifestación de pescadores en el pueblo de Nghi Thiet (provincia de Nghe An) y ha atacado a algunos manifestantes. Diversos heridos tuvieron que ser llevados al hospital y los agentes no han ahorrado ni siquiera a los ancianos. Las protestas, iniciadas el pasado 30 de julio, están dirigidas contra la construcción de un nuevo puerto que favorecería una de las mayores empresas de cemento vietnamita. Los pescadores -cuyo trabajo se volverá imposible por las naves de cargo- ´piden una indemnización que las autoridades no quieren conceder.
Para bloquear las manifestaciones, 100 agentes vestidos de civil han cerrado algunas calles de la ciudad con camiones de bomberos y ambulancias. Unos 700 pescadores a ese punto han desafiado a la policía que ha empezado a atacar a los manifestantes.
Nguyen Viet Nong, un hombre de 64 años, fue víctima de los enfrentamientos. El anciano debía ir a comprar remedios necesarios por su condición de salud, pero la calle fue bloqueada por la policía. Después de haber intentado pasar, Nguyen fue arrojado al suelo de una patada por un agente y narra. “Todos los otros empezaron a pegarme”.
Según los medios locales, la construcción del puerto inició el 19 de mayo pasado. El proyecto fue aprobado por la provincia en el año 2015. Cuando esté en pleno régimen la escala permitirá el transporte de 4 millones de toneladas de cemento por año. La ensenada podrá hospedar naves de hasta 70 mil toneladas.
Un pescador nos cuenta que los habitantes del pueblo se opusieron al proyecto en noviembre de 2015 y había rechazado los ofrecimientos económicos de las autoridades que varían de los 120 a los 1.900 dólares de compensación por cada barco pesquero (según sus dimensiones). Los trabajadores, que ahora se encuentran imposibilitados de trabajar y pescar, consideran que las cifras sean irrisorias. “Cuando terminemos de gastar ese dinero que nos quieren dar, ¿qué haremos? ¿Cómo pueden ayudarnos a encontrar un nuevo trabajo? ¿Dónde viviremos?”.