Para el p. Frederick D´Souza la hermana que será canonizada el próximo 4 de setiembre, ha transformado la experiencia de la Iglesia. La diaconía no es sólo servicio, sino sacrificio y el don de sí mismo.
Delhi (AsiaNews)- Madre Teresa de Calcuta es “el rostro compasivo de la Iglesia” es el “modelo inspirador para millones de operadores de Caritas en el mundo”. Lo dijo a AsiaNews el p. Frederick D´Souza, director de Caritas India pocos días antes de la canonización de la Madre, que se realizará en la plaza san Pedro en el Vaticano el próximo 4 de setiembre.
“Dentro de algunos días- dijo el p. D´Souza- Madre Teresa será elevada al honor de los altares como santa de la Iglesia católica. Esto es un honor y un reconocimiento que ya estaba en el corazón y en las mentes de millones de personas en el mundo. Muchas personas han escrito sobre ella, algunas reconociéndola como “Apóstol de la Misericordia”, otras criticando su trabajo dado que había conquistado la imaginación de mucha gente.
Y gracias a ella que las obras de misericordia se revitalizaron en la iglesia y mediante ella este profundo testimonio del amor de dios dio una nueva vida a la fe del pueblo.
Liturgia, kerigma (anuncio), diakonía (servicio) son las tres características fundamentales de la vida de la Iglesia. La diaconía, el mandato recibido por la comunidad apostólica, sufrió muchas interpretaciones y sufrido énfasis (desequilibradas). Madre teresa no sólo ha revitalizado en modo completo el espíritu de la diaconía; sino que dio a ella un nuevo significado: la diaconía es fecunda sólo si está acompañada por el sacrificio y el don de sí.
Caritas, que expresa el ministerio de la diaconía en la iglesia, celebra este importante evento eclesial para que Madre Teresa continúe inspirando a millones de operadores de caritas en el mundo.
Estos operadores están a menudo en las fronteras de los desastres naturales o producidos por el hombre o por la guerra, arriesgando sus propias vidas, llevando alivio, ayuda, asistencia. Pueda el espíritu de Madre teresa ayudar a la Confederación de caritas a ser el rostro compasivo de la Iglesia”.