Karimov tal vez haya muerto. El discurso de la Independencia fue leído por un presentador

Islam Karimov fue hospitalizado hace tres días por una hemorragia cerebral. Tradicionalmente, el estado de salud del presidente está rodeado del más absoluto secreto. Si se confirma la muerte, el país debe ir a nuevas elecciones dentro de tres meses. Los nombres de los candidatos "elegibles" como sucesores al trono.
 


Taskent (AsiaNews) - Hoy se celebra el 25to aniversario de la Independencia en Uzbekistán, mientras que desde hace algunos días siguen los rumores sobre la supuesta muerte del presidente Islam Karimov, quien fue hospitalizado por una hemorragia cerebral. Su discurso a la nación, que durante años era pronunciado orgullosamente por el Jefe de Estado, ayer fue leído por un presentador de televisión. El episodio levanta sospechas sobre la muerte del dictador, el líder del país desde 1989, es decir, incluso antes de que el Estado obtuviera su independencia de la antigua Unión Soviética en 1991.

Islam Karimov, de 78 años, ha estado hospitalizado desde el 28 de agosto. Siempre la noticia de su condición se ha mantenido en el más absoluto secreto, para no dañar su imagen. Pero esta vez fue la misma hija, Lola Karimova-Tillyaeva, quien anunció la hospitalización de su padre. En su perfil de Instagram, la mujer escribió que Karimov estaba "condiciones que se consideran estables" e invitó a todos a "abstenerse de la especulación".

El hecho de que fuera la hija del mismo presidente quien hablara de la enfermedad del padre conduce a los expertos a creer que la situación es más grave de lo que muchas personas habrían entendido. Si se confirma su muerte, la Constitución establece que el titular del Senado retoma las funciones provisionales del Presidente y que en el plazo de tres meses se llevan a cabo nuevas elecciones.

Karimov domina la política uzbeka desde 1989, cuando surgió como un líder del Partido Comunista. Al año siguiente fue elegido presidente y en 1991 el país obtuvo la independencia. Gracias a su puño de hierro ha conseguido alargar el período presidencial en dos ocasiones (1995 y 2002) y ser reelecto en dos rondas (2007 y 2015). En la última votación de marzo 2015, cuestionada por los observadores internacionales, ha obtenido el 90% de los votos.


El Presidente, así como sus colegas de las antiguas repúblicas soviéticas, es conocido por la supresión de todas las formas de disenso: activistas sociales, políticos y periodistas que denuncian la explotación de niños en los campos de algodón, el control sobre los medios de comunicación y otros aspectos de la vida son arrestados, torturados y obligados al silencio. Uzbekistán ocupa también el lugar 166 (de 174) en el ránking de los países más corruptos del mundo y el 166 (de 180) entre los que limitan la libertad de prensa.

Mientras la hija Lola escribió ayer en el perfil de Facebook que los numerosos mensajes de felicitación de la población "están ayudando" a la recuperación del Presidente, por días se alternan los nombres de los sucesores al trono, después de que en 2014 el candidato principal, la hija favorita Gulnara, fuera envuelta en un escándalo de corrupción de las empresas telefónicas internacionales.

Después de la caída en desgracia de la mujer, emergió la figura de Lola,  embajadora de Uzbekistán ante la UNESCO en París. En estos días aparecen los nombres de otros tres "candidatos elegibles" como sucesores al trono: el del primer ministro Shavkat Mirziyaev, de 58 años, en el cargo desde 2003, considerado por muchos como un Karimov pero más represor aún que éste; Rustam Azimov, de 56 años, ministro de Finanzas y un experto del extranjero; Rustam Inoyatov, de 72 años, jefe de la Comisión para la Seguridad Nacional, el menos seguro de los tres.