La iglesia de San Francisco de Asís fue construida en 1715. Miles de personas han participado en las lecciones de historia de la Iglesia, en el bautismo de 41 personas y en un concierto coral. Cientos de fieles son hospedados por las familias de la ciudad.
Xian (AsiaNews) – Del 1ero al 4 de octubre, para la fiesta de San Francisco de Asís, la diócesis de Xian ha celebrado los 300 años de la catedral, dedicada al santo de los estigmas.
Construida en 1715, la iglesia posee tres naves, con decoraciones y pinturas en estilo chino. Miles de fieles han participado en las diversas citas: conferencias, conciertos, muestras, todas orientadas a expresar la vitalidad de esta iglesia que ya abraza los tres siglos de historia, desde el primer obispo de la vicaría apostólica, Mons. Basilio Brollo (Ye Zongxian, franciscano), llegando hasta la actual diócesis, con Mons. Antonio Dang Mingyan.
Justamente el primero de octubre, Mons. Dang presidió la misa de aniversario, junto a otros 46 sacerdotes de dicha diócesis y de las diócesis vecinas. Estuvieron presentes más de 3.000 personas.
En el primer piso del episcopio fue preparada una muestra, una “galería histórica” que exhibía, entre otras cosas, 21 retratos de los obispos que se han sucedido en Xian. Por la tarde, hubo un gran concierto en el cual participaron unos 14 coros parroquiales.
Al día siguiente, los participantes pudieron escuchar algunas lecciones sobre la historia de la Iglesia en China y en Shaanxi. Intervinieron el académico Liu Ping, autor de una “Breve historia del arte católico chino”, y el Pbro. Hu Shibin, autor del libro “Catolicismo en Shaanxi”.
El momento culminante fue el 4 de octubre, fiesta de San Francisco. En la misa matutina fueron bautizadas 41 personas. Entre ellas, hubo varios ancianos y algunos niños recién nacidos, junto a jóvenes y adultos. El catecúmeno más anciano tiene 67 años de edad; el más joven, tan sólo 30 días.
A todos ellos les fue regalada una biblia con el logo del 300mo aniversario: “lámpara para mi pasos es tu palabra, luz en mi camino” (salmo 118).
Para permitir la participación del mayor número de fieles posible, la diócesis organizó tres comidas al día para los presentes y se movió a fin de que 600 personas fueran alojadas en casas de familia de la ciudad.