Moscú se dispone a proveer a Teherán de armas por un valor de 10 millardos de dólares

Las tratativas prevén la venta de tanques de guerra, sistemas de artillería, aviones de combate y helicópteros militares. Sobre el acuerdo pesa el posible veto del Consejo de seguridad de la ONU. Funcionario ruso: “estamos dispuestos a continuar con las tratativas”. Irán y China, decididas a desarrollar ejercicios militares conjuntos y a cooperar en la lucha contra el terrorismo.


Teherán (AsiaNews/Agencias) – Teherán y Moscú están puliendo los detalles finales de las tratativas que llevarán a la venta de armas de Rusia a Irán, por un valor global de más de 10 millardos de dólares. Según cuanto refiere un senador ruso, el Kremlin proveerá al ejército de la República islámica de tanques de guerra T-90 de última generación, sistemas de artillería, aviones de combate y helicópteros militares.

Viktor Ozerov, a cargo del Comité para la defensa y la seguridad de la Cámara Alta del Parlamento, refiere que los coloquios entre los dos frentes ya se encuentran en una etapa avanzada. En el reciente viaje a Teherán, efectuado por una delegación rusa, se discutieron los últimos detalles, y el acuerdo está listo para ser firmado.  

La provisión de armas y de equipamiento militar que Rusia brindará a Irán reforzará aún más la alianza existente entre Moscú y Teherán, que se vio emerger en el tablero sirio.

El año pasado, las Naciones Unidas levantaron –al menos en parte- el embargo que habían impuesto a la venta de armas a Irán a continuación de la firma del acuerdo  en materia nuclear concretada por Teherán.

Sin embargo, hasta el año 2020 se prevé que sea el Consejo de Seguridad de la ONU quien deba dar luz verde para el comercio de armas convencionales; y esta cláusula podría constituir un serio obstáculo para la conclusión del acuerdo entre el Kremlin y la República islámica.  

“Obviamente que los Estados Unidos y sus aliados –afirmó Viktor Ozerov – bloquearán esta provisión, pero nosotros estamos dispuestos  a continuar con las tratativas”. Por otro lado, en el pasado, Rusia ya supo brindar a Irán el sistema misilístico S-300, respetando así un acuerdo firmado en el 2007, pero que Moscú frenó durante largo tiempo, bajo las presiones de Occidente.

Durante largo tiempo, las relaciones entre Rusia e Irán han sido polémicas y conflictivas, pero en los últimos años han surgidos varios puntos en común y alianzas clave en relación a las principales controversias en el plano internacional. La guerra en Siria y el apoyo al presidente Assad es quizás el caso más evidente.

Es las últimas horas, altos funcionarios del gobierno de Moscú han resaltado que Rusia continúa sosteniendo los términos previstos en el acuerdo (internacional) en materia nuclear, y que la posición del Kremlin “no ha cambiado”. Una respuesta, si bien indirecta, a las afirmaciones del flamante presidente de los EEUU, Donald Trump, que en su campaña electoral supo definirlo como “el peor acuerdo jamás negociado”.

Aún queda por entender cómo se moverá la nueva administración estadounidense, si bien ha de  considerarse el hecho de que –al menos de palabra- el nuevo inquilino de la Casa Blanca tiene intenciones de reemprender las relaciones con Moscú y de abrir nuevas vías de diálogo con Vladimir Putin.

En tanto, Irán y China han anunciado un acuerdo que prevé el desarrollo de ejercicios militares conjuntos y la cooperación entre los dos países en la lucha contra el terrorismo. El general Hossein Dehghan, ministro iraní de Defensa, y su homólogo chino Chang Wanquan han sellado el documento, que los alía todavía más en los ejercicios chinos e iraníes.  En el marco de la firma, Beijing y Teherán también anunciaron el propósito de “crear un movimiento colectivo para combatir la amenaza” del terrorismo.