El Cairo, la negativa de cadena perpetua para Morsi, un paso para la reconciliación nacional
de Loula Lahham

En la semana, dos secciones de la Corte de Casación han anulado la condena a prisión de por vida para el ex presidente. Él aún debe afrontar una serie de procesos en los que se lo acusa de espionaje y torturas. Analistas y expertos hablan de sentencias políticas. Estudioso egipcio: La reconciliación debe involucrar a “todo el pueblo”. 


El Cairo (AsiaNews) – Esta semana, dos secciones de la Corte de Casación de El Cairo han anulado las duras penas de prisión [cadena perpetua, ndr] infligidas al ex presidente egipcio Mohamad Morsi, cercano al ala extremista islámica, y a los máximos dirigentes de los Hermanos Musulmanes. Una organización que hace tiempo fue incluida en la lista de movimientos terroristas, no sólo en Egipto, sino en varias naciones más. Esta decisión de los magistrados abre dos escenarios distintos para el país.

Mohamad Morsi, el primer presidente electo por el pueblo en la historia del país, fue  expulsado en el 2013 luego de producirse un movimiento de protestas masivo, apoyado por los militares, y se encuentra en prisión desde hace ya tres años. Y, a nivel jurídico, debe afrontar toda una serie de procesos:

- el proceso vinculado a los hechos ocurridos en el palacio presidencial de Ittihadiya [arresto y tortura de los manifestantes reunidos frente al palacio presidencial, ndr]: en este caso, ha sido confirmada una pena de 20 años de prisión.

- el gran proceso por espionaje a favor de la organización extremista islámica palestina Hamas; en este caso, los jueces han optado por anular la sentencia que dictaba prisión perpetua.

- el proceso por el asalto a las prisiones ocurrido en enero de 2013: hubo una anulación de la pena de muerte y la solicitud de un nuevo proceso

-proceso por espionaje por cuenta del Estado de Qatar, por el cual los jueces han condenado a Morsi a 40 años de prisión. En este caso, la Corte de Casación deberá pronunciarse en dicha materia mañana, 27 de noviembre.  

¿Qué compota para el país esta serie de pronunciamientos de la magistratura? ¿Es quizás un intento de una parte del gobierno egipcio en pos de calmar las aguas con la Hermandad, principal agente de protestas y de revuelta en el país?

El intelectual y académico Ahmad Ban afirma que las recientes sentencias de los tribunales son el resultado de una mezcla de política y justicia: “Morsi y sus compañeros son juzgados por tribunales civiles y normales. En general, podemos observar que existe una influencia de la esfera política, sobre todo en aquellas naciones en las cuales no existe una clara división entre los sectores de la magistratura y los de la política. Por eso, hoy más que nunca, se hace necesaria una reforma de este sistema”.  

Bachir Abdel-Fattah, estudioso y experto en movimientos islámicos que se desempeña en el Centro de estudios políticos y estratégicos de Al-Ahram, agrega: “La reconciliación debe ser el fruto de una acción que involucre al pueblo todo. Hablar de independencia del poder judicial con respecto a la política general de cualquier Estado es una utopía. Sin embargo, el poder legislativo egipcio –concluye- en líneas generales es bastante imparcial, y el problema de estos procesos es y será siempre -y desafortunadamente- la insuficiencia de pruebas y los errores en la preparación de los expedientes de investigación”.

Los Hermanos musulmanes, cuyo movimiento nació en 1928, han sido los primeros en dar vida a lo que hoy llamamos islam político; ellos tienen la intención de instaurar la sharia, la ley islámica, de muchas maneras diversas, incluso con el uso de la violencia.